"Cautelar por la calidad del ejercicio de la profesión".

Ese será uno de los ejes que Sebastián Gray buscará imponer, en los próximos dos años, como nuevo presidente del Colegio de Arquitectos.

Twitero, director de Fundación Iguales, profesor de la UC, ciclista, entre sus creaciones cuenta el edificio de Sicología del Campus San Joaquín y la librería Ulises del barrio Lastarria.

Considera que la preparación las facultades de arquitectura chilenas "son de nivel internacional", pero considera que eso no se nota en las ciudades.

-Si el gremio tuviera la responsabilidad irrenunciable de agrupar a todos los profesionales, de velar por una cierta calidad y responsabilidad en el ejercicio de la profesión, yo creo que el efecto de estas buenas escuelas de arquitecturas sería mucho más notorio en la ciudad. Realmente, creo que se han relajado los estándares constructivos y de diseño en Chile en los últimos 40 años.

-¿Por qué ha sucedido eso?

-Hay una triple responsabilidad. Por un lado están los inversionistas inmobiliarios, que siempre querrán el mayor retorno posible de su inversión. Luego está el ciudadano, que por ignorancia ha preferido valorar ubicación más que calidad constructiva, tamaños, altura de techos o incluso la aislación acústica de un tabique. Finalmente, están las autoridades que ponen los límites y reglas. Si el marco legal es laxo, el inversionista puede hacer lo que quiera.

-Pero hay arquitectos que trabajan en esos proyectos.

-Ese arquitecto es empleado del empresario, no es un arquitecto independiente, también hay que entender eso... Es un siervo más que un empleado, y si no tiene muchos escrúpulos, si no tiene una fuerte formación ética, ese arquitecto va hacer lo que le pidan. No va a poner condiciones.

-¿Un ejemplo de eso?

-El mall Costanera Center. Su dueño, el empresario Horst Paulmann, hizo el peor edificio posible para Santiago, en esa ubicación y en esas condiciones. Otra cosa es que él crea que con poner 500 tiendas de lujo le está haciendo un favor a Santiago. Se lo está haciendo, tal vez, a las personas en cuanto a individuos, pero como edificio en la ciudad es peor modelo posible. Paulmann es un ser mezquino.

-Unesco mandará dos misiones a Chile, una de ellas por el mall de Castro.

-Lo único que van hacer son recomendaciones para mitigar... pero no hay nada que mitigar ahí. Esto abre otro debate: cómo se hacen los instrumentos de planificación y qué es lo que la comunidad entiende como lo apropiado. Pero la verdadera noticia de todo esto es que la población de Castro aspira a tener ese mall porque esa su única imagen, no tienen ningún punto de referencia, no tienen cómo pensar que podría haber sido distinto. Pero ésa es la imagen de la modernidad, de la riqueza a la que, con justicia, aspiran.

-¿Te gusta lo que está haciendo el Gobierno con el Paseo Bulnes?

-Me parece un buen esfuerzo. Ahora, con el Palacio Pereira (Huérfanos con San Martín) yo sí tengo que hacer un reconocimiento al gobierno de Piñera, porque el gobierno da una señal extraordinaria al comprarle a un privado una propiedad para rescatarla. Eso no había ocurrido nunca antes.