32 son de oposición y dos son UDI. Aseguran que su intención fue resguardar la salud de la población sobre los criterios económicos. Ministro Mañalich está convencido de que el Senado repondrá indicación de las prescripciones.
Esos fueron algunos de los comentarios que emitió el ministro de Salud, Jaime Mañalich, tras lo ocurrido ayer en la Sala de la Cámara de Diputados, donde se perdieron dos indicaciones clave de la Ley de Fármacos: la que permitía la venta de remedios en góndolas en supermercados y la que instituía la obligación de que las recetas médicas fueron extendidas con el nombre del medicamento genérico.
Sus acusaciones esta mañana incluso apuntaron directamente contra el diputado Juan Antonio Núñez (PPD), de quien dijo "está a favor del ocultismo... Ocultar el nombre del medicamento genérico es completamente ilegítimo, es casi inconstitucional, va contra la ley del Consumidor y la ley de Derechos y Deberes de los pacientes... Parece muy raro que se piense que las personas son maduras para elegir si quieren o no abortar, si quieren o no fumar marihuana, pero que no puedan saber qué medicamento toman".
El mismo Núñez votó ayer en contra de vender remedios en lugares distintos a farmacias, aunque en 2007 fue uno de los parlamentarios que impulsó un proyecto en ese sentido.
Las palabras de Mañalich tuvieron inmediatas repercusiones en el Congreso, donde parlamentarios acordaron hacer una protesta formal al Presidente Piñera (ver pág. 4).
Quienes estaban a favor de la venta de remedios en góndolas de supermercados, almacenes y otros comercios similares, afirmaron que de esta forma podrían bajar los precios y además se facilitaba el acceso de quienes viven en lugares alejados de farmacias. Para la prescripción sólo por genéricos, el argumento era uno: posibilitar la compra de remedios más baratos que los de marca.
En el primer caso la votación fue de 45 en contra y 44 a favor. En el segundo, la diferencia fue aún más amplia: 66 votos en contra y 28 a favor.
Confrontando ambos listados, en total hubo 34 parlamentarios (32 de oposición y 2 de la UDI) que se opusieron a las dos iniciativas.
Las razones de los diputados
La Segunda consultó a algunos de esos diputados por qué tomaron esa postura y hubo consenso en afirmar que su intención era resguardar la salud de la población sobre los criterios económicos.
El diputado PS y ex presidente del Colegio Médico, Juan Luis Castro, dijo que colocar medicamentos en supermercados no ayudará a la gente, ya que "los fármacos sin receta son pocos y de bajo costo, mientras que los que impactan en el bolsillo, como los de la hipertensión o diabetes, no expandirían su venta".
A ello sumó "la ausencia de una fiscalización directa para el autoconsumo", afirmando que "la experiencia argentina indica que las intoxicaciones con venta en supermercados son mayores".
El UDI Iván Norambuena , que junto a su correligionario Ignacio Urrutia fueron los únicos del oficialismo que votaron contra ambos puntos, dijo que "esta ley que no estaba protegiendo los intereses de los ciudadanos. Vender fármacos en lugares distintos a las farmacias es un riesgo para la salud, y obviamente no podemos estar de acuerdo", sentenció.
El diputado PPD y también integrante de la "bancada médica", Enrique Accorsi , aseguró que en EE.UU. -donde se abrió la venta sin receta hace 25 años- "hoy el problema mayor de salud es la insuficiencia hepática por alto consumo de paracetamol".
Sobre el rechazo a que los doctores receten el genérico, Accorsi afirmó que "lo importante no es el genérico, lo importante es que sea bioequivalente, es lo que garantiza calidad. Como médicos nos comprometimos a que todos los que tengan bioequivalencia certificada, se pone (en la receta) el de marca y el bioequivalente".
Agregó que "Dejamos listos los almacenes farmacéuticos; que donde no haya farmacias se puedan instalar y que sean fiscalizados. Las postas rurales y consultorios también van a entregar medicamentos y vender algunos otros, abastecidos por la Cenabast", dijo.
El diputado Marco Antonio Núñez, también médico, y aludido directamente por Mañalich, dijo que el artículo de las recetas con medicamentos genéricos, "fue rechazado masivamente por la UDI y la oposición porque el ministro intentó engañar a los chilenos haciendo creer que bioequivalencia es lo mismo que genérico". Respecto de no ampliar la venta a supermercados, afirmó que "es una falsedad que los medicamentos bajarán de precio. Lo que hay detrás, es la sensibilidad del ministro Mañalich al lobby del retail, particularmente de Walmart, que quedó al descubierto".
Mañalich: "Lo doy por ganado"
Respecto a lo que hará ahora el Gobierno con las dos indicaciones perdidas, el ministro Mañalich dijo que en lo que respecta a la indicación que obliga al médico a escribir en la receta el nombre genérico de un fármaco, no se requiere una indicación del Ejecutivo, "porque así salió aprobado por amplia mayoría en el Senado, en el primer trámite. Eso lo doy por ganado, porque el Senado ya se pronunció y las comisiones de Salud y de Hacienda".
Donde adelantó que van a insistir es en permitir la venta de remedios que no requieren receta médica en góndolas de establecimientos comerciales, como supermercados, bombas de bencina, o almacenes, "porque eso significa un ahorro y un acceso a medicamentos que es ineludible. Estamos hablando de una carga financiera para la ciudadanía de unos US$ 50 millones al año, sobre todo la gente más pobre, que no es aceptable".
Y aseguró que "no sé si lo haremos (ingresar esta indicación) en el Senado o en la comisión Mixta, es una decisión del ministro (Cristián Larroulet)".
