Cuando se conoció la información de que la casa del exrector de la Universidad del Mar, Héctor Zúñiga, estaba siendo afectada por un incendio, no pocos pensaron en primera instancia que el origen del siniestro pudo haber estado relacionado a un posible atentando, esto a la luz de las protestas, funas y furtivos ataques de la que ha sido objeto la vivienda ubicada en la calle Los Queltehues, en Reñaca.

De hecho, la última situación de este tipo ocurrió el pasado domingo, cuando al menos cuatro personas encapuchadas llegaron en horas de la madrugada hasta el domicilio de Zúñiga para lanzar bombas de pintura y encender fogatas a las afueras del inmueble, además de gritar consignas en contra de la exautoridad de la Universidad del Mar, quien se encuentra con arresto domiciliario por orden de la Tercera sala de la Corte de Apelaciones de Santiago en el marco de la investigación por el caso acreditaciones fraudulentas.

Sin embargo, el siniestro de anoche, que se inició cerca de las 22:45 horas, tuvo como causa el sobrecalentamiento de una chimenea, afectando el tercer piso de la vivienda, esto de acuerdo a la información entregada por el oficial de ronda de la Prefectura de Carabineros de Viña del Mar, teniente Jesús Wastavino, quien se apersonó en el lugar.

Para combatir las llamas llegaron al lugar voluntarios de las compañías Quinta, Sexta y Octava del Cuerpo de Bomberos de Viña del Mar, a cargo del teniente Andrés Escobar, quienes de inmediato comenzaron con las labores de extinción de las llamas, las cuales en un primer momento fueron combatidas por los propios miembros de la familia de Héctor Zúñiga, pero sin obtener resultados positivos.

En este intento, uno de los siete miembros del grupo familiar que a esa hora se encontraban en la vivienda resultó con lesiones leves en sus manos producto del fuego.

La emergencia, que dejó daños en tres habitaciones del tercer piso, pudo ser finalmente superada a las 00.12 horas, según precisó la central de informaciones de Bomberos de la Ciudad Jardín.

Cabe consignar que el incendio que afectó a la casa de Héctor Zúñiga causó gran expectación entre los vecinos y, lógicamente, en distintos medios de comunicación que acudieron al siniestro.

Sin embargo, no fue fácil la tarea de cubrir el incendio ya que amigos o cercanos a la familia de Zúñiga, sobre todo adolescentes, comenzaron a obstruir el trabajo de la prensa mediante distintas acciones, siendo la más común el hecho de tapar los lentes de las cámaras de los profesionales.

Por el momento, de desconoce si la familia seguirá habitando el inmueble afectado o se trasladará a otra vivienda producto de los daños que dejó el siniestro, consigna soychile.cl .