Cita coordinada por el subsecretario para la Prevención del Delito reunió a cerca de 150 locatarios de todo Santiago y tuvo momentos de alta tensión. Fallas en los locales van desde preparación de personal hasta cámaras de seguridad de mala resolución.
En una inédita instancia, esta mañana se reunieron cerca de 150 dueños y administradores de discotecas de Santiago con autoridades de gobierno y Carabineros, en busca de caminos para aumentar la seguridad en los locales nocturnos.
El último de los hechos de violencia, y que derivó en la cita de esta jornada, se registró la madrugada de este domingo, cuando un hombre fue baleado en el estacionamiento de la discoteca Excalibur de San Bernardo. Anteriormente, el pasado 9 de marzo otras dos personas murieron por un ataque con arma de fuego, esta vez en el local Claxon.
En la ocasión estuvieron el subsecretario para la Prevención del Delito, Cristóbal Lira; el intendente de Santiago, Juan Antonio Peribonio y el jefe de la Zona Oeste de Carabineros, general Rodolfo Pacheco, quienes escucharon las demandas de los locatarios. Entre los locales representados estuvieron las discotecas Brodway, Claxon y Excalibur, el teatro Caupolicán, agrupaciones de locales nocturnos de Bellavista, entre otros.
En muchas de las ocasiones, la conversación alcanzó niveles de tensión, cuando los comerciantes exigían más actuar del personal policial. En uno de esos momentos, el general Pacheco indicó "si tienen a una persona ebria dentro del local, nos tienen que llamar para sacarla". Eso generó una pifia generalizada, donde le respondieron con gritos frases como "pero si nunca vienen" o "si hacemos eso nos sacan multas".
Las seis falencias
Durante la reunión, oficiales de Carabineros del OS-10 expusieron las principales seis falencias que han detectado en los locales nocturnos. La primera falla es la falta de controles en los accesos a las discotecas y a los estacionamientos. En segundo lugar, mala iluminación en los sectores aledaños y en los lugares donde aparcan los vehículos.
El OS-10 también indicó que "en muchos casos las cámaras de seguridad son de mala calidad, para abaratar costos", lo que no permite identificar a quienes realizan delitos dentro de los locales. El cuarto punto es la falta de cierre perimetral y también se detectó como falencia que existiera una inadecuada rotación del personal que ejerce labores de guardia. El sexto ítem fue "deficientes niveles de preparación de quienes tienen el rol de minimizar los riesgos".
Los carabineros también entregaron sus propuestas: Las principales son mejorar los sistemas de ingreso, optimizar la iluminación, capacitar a los guardias. Además, propusieron un sistema de "seguridad integral", que incluyera el uso de paletas detectoras de metales, CCTV de alta definición, intercomunicadores entre el personal y que adquieran algunos elementos de protección.
Al finalizar la reunión José Aravena, de la discoteca Delfos y quien representa locatarios de Bellavista, indicó que "nosotros proponemos tres medidas concretas. Que se instale un lector de huella dactilar en la entrada, porque así un tipo con prontuario no asistirá. Además, que podamos usar el derecho de admisión y dejemos fuera a los que sabemos son conflictivos. En último lugar, que los guardias estén capacitados para revisar a las personas, porque hoy no pueden hacerlo".
Finalmente, el subsecretario de Prevención del Delito, Cristóbal Lira, informó que acordaron crear una mesa de trabajo para ver los temas de mediano y corto plazo para velar por la seguridad en los centros nocturnos. "La Región Metropolitana quedó distribuida en cinco zonas (Centro, Norte, Sur, Oriente y Poniente) y a la mesa concurrirán dos representantes de cada sector para ver las medidas que se pueden adoptar. Esto comienza la próxima semana", dijo.
