El examen, que se realiza con un dispositivo mediante la saliva, podría comenzar a ser aplicado en los próximos meses en las calles del país. Ya se utiliza en España, Francia, Suiza y Alemania.
"Mucha gente, en vez de tomar, prefiere consumir drogas... Total, nadie lo sanciona".
El dato lo entrega Gustavo Garcés, empresario que importa el test que detecta doping y quien advierte que esta situación ya tiene fecha de vencimiento, porque la debutante "Ley de Tolerancia Cero" no sólo pone restricciones a la ingesta de alcohol, sino que también contempla medir el consumo de drogas en los conductores.
Y efectivamente la modificación a la Ley 18.290 -promulgada a comienzos de mes- no sólo aumenta las sanciones por manejo en estado de ebriedad... también lo hace con los "estupefacientes o sicotrópicos".
Si bien esta parte de la ley aún no está operativa, las autoridades ya se están preparando para implementarla.
Así lo admitió la directora del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas (Senda), Francisca Florenzano, quien -a propósito de los cambios legales- adelantó a "La Segunda" que habrá una "medición de conducción bajo el efecto de las drogas, por lo que en un par de meses estaríamos fiscalizando".
Y agregó que para ello se ocuparán "narcotests" o "lengüetas que a través de la saliva identifican si hay presencia (de estupefacientes). Mide cinco tipos de drogas que son las que más se consumen en el país: marihuana, cocaína, pasta base, metanfetaminas y éxtasis".
En la lengua por un minuto...
Aunque el mandato legal está vigente, por ahora el foco estará puesto en la campaña que evita la conducción bajo la influencia del alcohol, para pasar -en una segunda etapa- a los sicotrópicos y drogas.
Si bien en Chile no hay estudios que definan el rango de consumo de estas sustancias que provocan dificultad al conducir, el método sí es usado ampliamente en España, Francia, Suiza y Alemania (ver recuadro).
¿Cómo funcionan estos kits móviles?
Gustavo Garcés es el dueño de la empresa Rapidtest, que importa diversos exámenes de este tipo que vende a clínicas y empresas mineras. Asegura que las unidades son traídas desde Canadá a un costo por unidad cercano a los $ 4 mil, pero los venderá a un precio cercano a $6.500.
Se trata de un dispositivo desechable, de plástico, que se pone en la lengua cerca de un minuto. Si da positivo, la placa se tiñe de color. Si no hay consumo, no se colorea. De esta forma, el test sólo determina si existió consumo, pero no logra definir el nivel de éste.
"Cuando la ley empiece a operar de manera completa creemos que las ventas van a ser muy altas, porque se sabe que los jóvenes ahora prefieren consumir drogas en vez de alcohol", dice.
También hay en las farmacias
Pero no es el único dispositivo para detectar el consumo de drogas. En las farmacias ya existen kits de control a $8 mil, aunque se trata de un examen con orina, lo que dificulta su uso masivo como instrumento de fiscalización en la calle.
El médico Franco Utili -especialista en urgencias de la Red UC- señala que es clave dar una señal potente para que se rebajen los niveles de consumo en los jóvenes.
"En general, detrás de las sustancias alcohólicas también hay sustancias que alteran la capacidad de manejo y eso puede provocar accidentes. Es positivo desalentar el uso de estupefacientes".
Dice que con la cocaína y el éxtasis, el conductor tiene un estado de ánimo alterado "y siente que es capaz de hacer muchas cosas, mucho más riesgosas".
En cuanto a la marihuana y algunos tranquilizantes, pueden entregar un efecto sedante que también afectaría la vigilia del conductor.
El dispositivo que se quedó en proyecto piloto
El especialista en tránsito y profesor de la U. de Chile Milton Bertín recuerda que el dispositivo se aplicó en forma piloto en el 1998, pero "a poco andar fue desechado porque el alcohol es el mayor problema, es la droga lícita que genera los accidentes en el país".
En cuanto a las sanciones, el diputado Pepe Auth (PPD) -de la Comisión Transportes- explica que, de acuerdo con la ley, el "estado de intemperancia es asimilado a estar bajo la influencia de las drogas por lo que ambas situaciones deberían tener la misma sanción. Esto debería operar de manera frecuente porque, hasta ahora, solamente es aplicado por Carabineros cuando hay accidentes de tránsito; es decir, cuando el daño está hecho".
Para Juan Carlos Latorre (DC), en cambio, "es mucho más grave que una persona esté manejando bajo los efectos de las drogas ilícitas que del alcohol, por los riesgos que ello conlleva", por lo que debieran aplicarse estas pruebas para detectar el consumo de drogas entre automovilistas.