"Desgraciadamente grabé a Rosende cuando dijo en tres oportunidades que no había tsunami. La primera vez, a las 5 de la mañana, yo le creía. Pero una hora después cuando volvió a hacerlo yo pensaba esto no puede ser, si las radios dicen otra cosa", dice Jorge Tapia.
Estuvo en el corazón de las decisiones la madrugada del 27F y miraba estupefacto lo que ocurría en la ONEMI. Y aunque el nombre del director de televisión Jorge Tapia Vidal no dice mucho, fue quien grabó el video de 120 minutos que quedó como registro histórico de lo que pasó durante las primeras horas de ocurrido el megasismo y que aclaró muchas dudas que llevaron a la fiscal Solange Huerta a pedir la formalización de ocho personas por su responsabilidad en las 156 muertes ocurridas tras el posterior tsunami.
Como director del departamento audiovisual de la ONEMI (cargo en ocupó entre agosto 2008 a octubre 2010), Jorge Tapia se convirtió en un testigo privilegiado de los acontecimientos que aún siguen remeciendo a Chile.
En vísperas de cumplirse dos años del trágico sismo y maremoto por primera vez concede una entrevista a pesar -reconoce- de que "hubo muchos ofrecimientos, pero no me sentía preparado".
Hoy cree que ha llegado el momento de hablar y contar lo que vio, escuchó y registró con su cámara de alta definición adquirida a instancias de la ex directora Carmen Fernández, con el propósito de producir documentales educativos que permitieran prevenir los riesgos de catástrofes a la población.
Jorge Tapia, quien en la actualidad se desempeña como docente universitario y crítico cinematográfico, recuerda que el terremoto lo sorprendió en su casa en Ñuñoa. Tras chequear la situación familiar, se vistió con las indumentarias de la ONEMI y salió a la calle donde un radiopatrullas, que fortuitamente pasaba por calle Irarrázaval, lo llevó a las oficinas de Beaucheff.
"El departamento audiovisual lo componían además un productor, un periodista y un camarógrafo, pero ninguno estaba presente por lo que cargué la cámara y partí al salón de reuniones; eran las 04:50 horas", cuenta.
Pocas semanas antes había concluido una serie de 12 documentales titulados "Zonas de Riesgos" que grabó precisamente en Concepción, Talcahuano y Constitución. "Esos reportajes serían presentados a las autoridades regionales, intendentes, alcaldes, gobernadores, FF.AA., Carabineros, pero no alcanzamos... Eso quedó ahí y nunca más se mostró no más".
Apedreaban a los de la ONEMI en el sur
También recuerda que inexplicablemente al asumir el nuevo director de la ONEMI, el recientemente renunciado Vicente Núñez, éste prohibió que se volvieran a hacer filmaciones.
El logró hacer las últimas grabaciones el 4 de marzo en las zonas de la catástrofe, donde a los funcionarios de la ONEMI la población los apedreó y debieron sacarse las camisetas institucionales para poder continuar trabajando.
La noche del 27F comenzó a filmar incansablemente. Su grabación está hoy en poder de la fiscal Solange Huerta y además, durante 9 horas, en tanda de dos días, Tapia le entregó su testimonio.
"Emocionalmente estábamos todos alterados en la ONEMI... Y se produjo un cuello de botella porque el cúmulo de información que empezó a llegar, región, intensidad, los grados, los posibles deterioros, la conectividad, entraban en un tubo que se taponeó. Y como no había filtro se quedaron ahí... en jerga futbolera se diría que la pelota quedó saltando y nadie metió el gol. Y la pelota estuvo horas saltando y nadie la quiso tomar", señala.
Tal situación, dice, se produjo porque "pasaba por una persona, y sólo quiero hacer un racconto , sin emitir un juicio, pero todo pasaba por el jefe del CAT (Centro de Alerta Temprana), Johaziel Jamett. Toda la información que recaban los geólogos, los geógrafos, los sismólogos, le entregaban información a él. El la tomaba y la procesaba... pero hasta ahí no más llegaba".
Hoy Tapia reflexiona y dice que hasta hoy "no entiendo lo que pasó; había instrucciones claras que cualquier sismo sobre grado 7 traería aparejado un tsunami -que en japonés significa ola grande-, salvo que hubiese ocurrido a 700 kilómetros en la cordillera o 300 kilómetros de profundidad en el mar".
Por eso que su lente registró situaciones y rostros -como dice él- que hasta hoy no logra comprender a cabalidad la inacción en la que se cayó.
"En la ONEMI hay una especie de manual de procedimiento en una pizarra que instruía los pasos a seguir, aparentemente estaba todo tan claro", señala.
-¿Qué cree que ocurrió entonces que no se dio la alerta de maremoto que significará la formalización del ex subsecretario Rosende, de Carmen Fernández y otros funcionarios de la ONEMI?
-En mi opinión yo creo que se vieron sobrepasados... Es decir, había una gran flujo de informaciones que llegaban al CAT (Centro de Aletra Temprana) y no estaba siendo bien procesada. Esa información se acumulaba y acumulaba...
-Pero se supone que era personal entrenado y capacitado para enfrentar emergencias...
-Se supone; en mi caso puedo decir que yo recibí cuatro capacitaciones en relación a zonas de riesgos. Con Carmen Fernández se incrementaron las capacitaciones. Voy a decir algo: si no se hubiesen hecho entrenamientos en algunos lugares del país, probablemente, el número de víctimas habría sido muchísimo mayor. No quiero que se malinterprete lo que digo, pero en Iloca la población había sido entrenada y corrió a los cerros y no hubo víctimas. Pero qué se puede hacer en el caso de la isla frente a Constitución... desgraciadamente no tenían salvación los que estaban allá. Este terremoto fue de tal magnitud que movió el eje de la Tierra y Talcahuano se movió 4 metros.
-Está bien, pero queda claro que no se actuó en forma oportuna para prevenir y dar la alerta...
-Insisto que las informaciones que llegaban no daban las certezas o más bien no se procesaban... La Presidenta Bachelet dijo varias veces que no se podía correr el riesgo de provocar una alarma injustificada y que era necesario tener todos los antecedentes antes de hacer un llamado a evacuar. Yo registré las tres veces que el ex subsecretario Rosende insistió en el punto de prensa que no habría maremoto; la ex Presidenta también lo dijo una vez... Yo creo que pasaron cosas como que no se supo interpretar los documentos de Hawai, dijeron que señalaban mareas de "18 centímetros" siendo que la medición era en otra tabla.
El silencio a las preguntas de Bachelet
"No se podían tomar decisiones -agrega- porque era todo confuso. A mí me angustiaba el silencio ante las preguntas de la Presidenta... no tenía respuestas de nada. Entonces eché mucho de menos respuestas concretas. Cuando me percaté que esto sería un registro histórico seguí grabando y más que respuestas orales me enfoqué en lo gestual, en las miradas, algunas bajas. Estaban todos desconcertados.
-¿Considera que hubo negligencia de los imputados?
- Más que negligencia, creo que se vieron sobrepasados. Carmen Fernández tenía al gobierno encima ¡Imagínate ahí estaba todo el poder del país a su alrededor! Y las informaciones no eran definitivas... Y seguían esperando información.
-¿Cómo se entiende que funcionarios con experiencia de la ONEMI no supieran la diferencia entre alerta y alarma de tsunami?
-Es inexplicable. Yo no me lo puedo explicar porque lo primero que uno aprende en un curso es distinguir la alerta de la amenaza, de la vulnerabilidad. Hay conceptos que son muy claros. En la ONEMI, en el CAT hay un muro, con una pizarra donde están escritos qué hacer en caso de grado 1, 2, ó 3. Y cuando llega al grado 7, se indica que hay que dar la alerta inmediatamente.
El CAT es el corazón de la emergencia, tenía una estructura muy vertical. Creo que las personas que están ahora seriamente involucradas es porque no tomaron en su momento la decisión acertada y es lamentable porque Johaziel Jamett, que además era bombero, tenía toda la autoridad.
-Pero es grave lo que dice porque significa que nadie sabía qué hacer... ¿qué decían las Fuerzas Armadas y Carabineros y los ministros presentes?
-Las Fuerzas Armadas siempre mantuvieron silencio. La Armada no estaba presente; Carabineros que cuenta con Cenco que son radios tampoco dijo nada (a la Presidenta el edecán de Carabineros le informó lo de Juan Fernández).
"SHOA dijo que no había maremoto"
-¿A usted le consta que el SHOA dijo que no habría tsunami?
-Si, me consta porque lo grabé cuando por radio ellos dijeron que no habría maremoto...
-¿Está seguro de lo que dice?
-Absolutamente... yo lo registré. Recuerdo que el SHOA dijo que no existía peligro de tsunami y el operador le dijo si se lo podía mandar por escrito.
Asegura que una de las imágenes que más lo marcaron fue "cuando la Presidenta se angustió. La noté desesperada porque "no había claridad respecto de si habría o no tsunami".
Y reconoce que su trabajo visual aclaró muchas dudas: "Desgraciadamente grabé a Rosende cuando dice en tres oportunidades que no había tsunami. La primera vez, a las 5 de la mañana, yo le creía. Pero una hora después cuando volvió a hacerlo yo pensaba esto no puede ser, si las radios dicen otra cosa".
