Como un caso puntual, pero que mancha su gestión, calificó el alcaide del penal Colina II, comandante de Gendarmería Carlos Muñoz, la libertad del presunto sicópata Felipe Deformes, quien aprovechó que se le otorgó la libertad dominical para asaltar y violar a una mujer en Ñuñoa, para luego realizar una seguidilla de delitos.

Muñoz dijo a "La Segunda" que "Colina II ha sido una cárcel que desde siempre fue estigmatizada por muertes violentas, un sistema muy disciplinario, pero en mi administración en ocho a nueve meses hemos logrado revertir esta tendencia. Hoy tenemos 80 usuarios con beneficios carcelarios, que cuando llegué eran 4.De estos, el quebrantamiento ha sido de cerca de 9 casos". El alcaide agregó que "este es un caso puntual que mancha toda la gestión que hemos estado haciendo, pero en ningún momentos nos hemos alejado del marco legal".

El comandate dijo que se aprobó por siete votos contra uno la libertad de Deformes. El único sufragio en contra en el seno del consejo técnico fue de un terapeuta ocupacional. Agregó que se está recando los antecedentes para enviarlos al fiscal Carlos Gajardo.

Muñoz también dijo desconocer la presunta relación entre Deformes y una sicóloga del penal y que si fuera así "ella no estaría trabajando aquí".

-¿Hubo un error en su liberación?

-Nosotros sólo evaluamos la conducta de los internos. El cumplía con los parámetros para obtener el beneficio.