La conocida empresaria Gladys González, "La Cuca", pareciera que se tomó en serio las palabras del vocero de gobierno, Andrés Chadwick, de echar "toda la carne a la parrilla" en el conflicto estudiantil, y cortó por lo sano ante la toma de uno de los colegios subvencionados del que es sostenedora: trasladó las clases a su emblemático local de Vespucio con Departamental.

"Es lo que hay, no es lo ideal pero sirve", comentó Ana Larenas, madre y apoderada de dos niñas de cuarto básico y cuarto medio del Colegio Shira Yuri de La Florida -que cumple ya dos meses y medio en toma- ante el hecho de hacer clases en "Parrilladas Donde La Cuca" a los alumnos que quieren continuar sus estudios.

Fue hoy por la mañana -y hasta las 13 horas- que los salones, mesas y sillas que habitualmente albergan a los parroquianos del lugar albergaron a más de 200 niños entre séptimo básico y cuarto medio con sus profesores.

Votación fue por levantar movimiento, pero...

La idea nació tras una votación el lunes de toda la comunidad escolar -padres, apoderados, alumnos y profesores-, quienes, por 680 votos a 180, definió el fin de la toma del establecimiento que alberga a 1.200 alumnos entre primero básico y cuarto medio. El problema, dice Larenas, es que "unos 20 alumnos no acataron y siguen ocupando el colegio y no quedó otra alternativa que hacer esto".

La apoderada dice que el número de alumnos irá aumentando, ya que "para hoy a muchos niños no les alcanzamos a avisar y a otros les da miedo venir porque quienes siguen en toma los tienen amenazados".

"La toma se transformó en una fiesta, se sumaron todas las movilizaciones y así no podíamos seguir", añade con enojo.

La idea es que para principios de la próxima semana el Shira Yuri ya esté habilitado para retomar las clases.