Reina Isabel anuncia plan de referendo sobre participación británica en la Unión Europea
Se celebrará antes de que termine 2017.
por:
DPA/Reuters
miércoles, 27 de mayo de 2015
Londres.- Ya es oficial: el referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea se celebrará antes de que acabe 2017, según consta en el programa del gobierno conservador del primer ministro David Cameron, que hoy presentó la reina de Inglaterra, Isabel II.
La reina hizo el anuncio en el tradicional discurso inaugural de la legislatura, en el Parlamento de Westminster en Londres. Rodeada de pompa y boato,
la reina, con corona y sentada en el trono de la Cámara de los Lores, lee una
vez al año este discurso preparado por el gobierno en el que se esbozan los
principales planes para el curso.
El premier ya había prometido esta consulta a comienzos de 2013.
Antes de la votación, Cameron quiere negociar una serie de reformas en el bloque europeo "por el bien de todos los Estados miembro", según señaló su gobierno, que no quiso detallar nada como parte del programa.
Se espera que el gobierno dé a conocer más detalles sobre el referéndum el jueves, entre otros aspectos la pregunta que se formulará en el plebiscito. Según la BBC, será "sí" a favor de permanecer y "no" para abandonar la Unión Europea, lo que se considera una ventaja psicológica para los que defienden a la UE.
Tradiciones ancestrales
La tradición del discurso de la reina se remonta a 1536 y está rodeada de un gran protocolo. El emisario de la reina que tiene como tarea ir a buscar a los diputados para el discurso, es recibido con un portazo en las narices para simbolizar la determinación de los parlamentarios a mantener su independencia.
Además, durante el discurso, un diputado permanece cautivo en el palacio de Buckingham, para asegurarse de que la soberana, de 89 años, vuelve sana y salva.
Isabel II recorre la distancia entre el parlamento y el palacio de Buckingham en una carroza dorada y pronuncia el discurso en el trono de la Cámara de los Lores, al lado de su marido, Felipe de Edimburgo.
La alocución concluyó como manda la tradición, con una invocación divina: "rezo para que la bendición de Dios todopoderoso presida vuestras deliberaciones".
El de este miércoles fue el 62º discurso parlamentario de Isabel II.