El artista francés Paulo Grangeon, junto con el Fondo Mundial para la Naturaleza o WWF, decidió crear 1.600 pandas de papel maché en Taiwán y llevarlos en un viaje a través del mundo para alertar y concienciar al mundo sobre la trágica realidad actual de la especie de osos pandas.
Cada uno de estos pandas de papel representa uno de los únicos 1.600 pandas que quedan en el mundo.
Los pandas ahora se encuentran en las escaleras hacia el buda de Tian Tan, en la isla de Lantau, Hong Kong (China).
