por:
La Segunda
lunes, 10 de noviembre de 2014
La relación entre el plantel de Colo Colo y los dirigentes está llegando a su punto más tenso desde que el defensa Julio Barroso manifestara sus sospechas respecto de un eventual arreglo del campeonato.
Los jugadores están molestos con Blanco y Negro por su falta de apoyo público en este caso y ayer, tras la victoria alba sobre Audax Italiano en el Estadio Monumental, el plantel sencillamente se rebeló.
Como es habitual, los directores Leonidas Vial, Aníbal Mosa y Arturo Salah, este último presidente del club, se dirigieron a los camarines para saludar a los jugadores. Mosa ingresó sin problemas, pero Vial y Salah fueron bloqueados por los guardias de seguridad que custodian el vestuario.
Funcionarios del club se apresuraron en informar a los dirigentes que mejor no entraran porque no serían bien recibidos por el plantel. El técnico Héctor Tapia debió recibir las felicitaciones fuera del camarín.
El tema continuará mañana con una reunión citada por el directorio con Julio Barroso; el capitán de Colo Colo, Gonzalo Fierro, y el técnico, Héctor Tapia.