"Mi sueño de niño era trabajar en un videoclub". La frase, cuya última palabra aparece gigante e iluminada, abre la retrospectiva "Videoclub" de Martín Sastre (38) en el Museo de Artes Visuales, en Lastarria. Luego hay una gran Hello Kitty -"La mona lisa del futuro", se lee- personificando a Bachelet. Después, un video del spot "U from Uruguay", perfume extraído de flores del jardín del Presidente Mujica. En otra sala están las películas y cortometrajes del autor (que el visitante puede arrendar) y una réplica de la chaqueta de Michael Jackson del video Thriller.

En un cuaderno abierto al público, un señor escribió: "Me parece una propuesta vacía de contenido. Realmente me sentí perdiendo el tiempo". Sastre se ríe y dice que cuando no siente afinidad con una obra intenta meterse en la cabeza del autor y pensar por qué se tomó la molestia de hacer todo esto. "Siempre descubro cosas interesantes", afirma. "Le recomendaría al señor que hiciera el ejercicio, porque no entender no es responsabilidad del artista, sino del espectador. De todas formas creo que no hay nada que entender en ningún lado. Hay que pensar y sentir".

Bachelet y Mujica

-Tu imagen de nuestra Presidenta es extrañamente encantadora.

-Michelle es muy Kitty. Lo tenía servido. Y ambas me gustan, me generan empatía. Nunca haría, por ejemplo, una Hello Pinochet. No trabajo sobre lo que no me gusta.

-Pero la política es muy seria.

-Mi idea de reivindicar o reflexionar es hacer foco sobre lo que me parece que está bien, Hello Kitty y Michelle Bachelet me parecen que están bien y juntas parece que son dinamita. Muchos coleccionistas ya me pidieron la Hello Michelle, ojalá quede en Chile.

-Sería bueno saber si le gustó.

-Llámala y me cuentas.

-¿Y cómo nació el perfume de Mujica?

-En el aeropuerto de Génova. El vuelo se había retrasado y comencé a caminar en círculos en la puerta del embarque. Lo que se me ocurrió ahí es prácticamente lo mismo que se ve en el video. Si van al aeropuerto y ven círculos en el piso ya saben... pasé yo pensando una obra.

-¿Es mejor Presidente del mundo o argumento de venta para Uruguay en el extranjero?

-Terminar hablando con Leonardo Di Caprio sobre el Presidente de Uruguay es algo que nunca pensé que me iba a suceder, y sin embargo gracias a Mujica me sucedió. Creo que eso contesta cualquier pregunta sobre lo que opino de él como político y como Presidente, es lo mejor que le podría haber pasado a Uruguay y creo que a la región.

Militante de la felicidad

Sastre acaba de lanzar un pequeño libro-manual de guerrilla para aspirantes a artistas llamado "Actitud" (Ediciones Metales Pasados). Allí está todo, desde cómo inventarse un pasado hasta hacer negocios en una fiesta a las 3 de la mañana. "Ahora eres un transformer, transformas cada lugar donde estás con tu sola presencia", escribe. "La aburrida Bienal es una fiesta y la cena formal en la Embajada, una partida de strip póker".

¿Una autobiografía pero con otro formato? "De alguna forma lo es. Cuento desde la experiencia, y de forma muy irónica, mis propias vivencias. Siendo un artista latinoamericano que trabaja en el campo del arte mundial, lo único que se encuentran son barreras que deben pasarse. Y el manual ironiza, pero también reflexiona, sobre ellas".

-Tu obra apela al cine más pop

-No me formé en una universidad como artista, soy autodidacta y es por eso que soy un artista popular, mi cultura audiovisual entró por la televisión, el cine y los videoclips, es muy grande y la disfruto, es por eso que esos referentes son mi materia prima, porque me gustan.

-¿Cómo llegaste a esa claridad que expones en "Actitud"?

-El espíritu que hay en todo el libro es el de siempre reír: de los errores, aciertos y más que nada, del propio campo del arte. Reírse de algo no significa que no lo tomes en serio. Sino que, por el contrario, te lo tomas muy seriamente, pero con humor. El humor es una forma de la inteligencia y sin humor, creo que es imposible salir de una experiencia tan intensa como la de dedicarse al arte y ser artista.

-¿Por qué la complejidad y la seriedad tienen tan buena prensa?

-Meryl Streep no ganó el Oscar por Mamma Mia donde canta y baila sino que se lo dieron por Kramer vs. Kramer donde grita y llora. El drama, el trauma y la infelicidad son considerados estados más profundos que la risa, la alegría y la felicidad. Lo que habría que preguntarse es quién lo determina. O, más bien, quién lo valida una y otra vez. Desde luego, en mi caso, soy un militante de la felicidad.

-¿Y eso incluye a los artistas?

-Tenemos no sólo el derecho sino también el deber de vivir bien y disfrutando. La idea del artista torturado, consumido por las drogas que muere joven por ser un genio, no me va para nada. Me parece injusta. Yo no diría que un abogado para ser un gran abogado deba vivir en una buhardilla, pasar hambre y morir de sobredosis a los 27. ¿Entonces, por qué a los artistas se nos exige vivir, respirar, crear y devolver trauma?

-¿Cómo salir de eso?

-Lo interesante es pensar de dónde vienen esos mandatos sociales, ahí está la clave. Por las dudas, conmigo que no cuenten; no tengo mucho tiempo intentando, como todo el mundo, ser feliz. Prefiero estar bien para hacer bien.