"Es un importante avance", dijo la ministra de Educación. La medida permitirá que los estudiantes no pierdan el avance curricular y puedan seguir viviendo en la misma ciudad.
Les reconocerán el avance curricular. No tendrán que moverse de su ciudad para seguir sus estudios. Podrán recibir becas y ayudas estatales. Y les garantizarán sede y profesores para terminar la carrera.
Ese es el escenario que desde este jueves enfrentarán 1.300 alumnos de la Universidad del Mar de las sedes de San Fernando, Curicó y Talca luego que el Ministerio de Educación acordara un convenio de movilidad estudiantil con la Universidad Católica del Maule.
"Es un importante avance que dará solución a los alumnos de la Universidad del Mar", dijo la ministra Carolina Schmidt.
Explicó que "con esto será una universidad tradicional y acreditada quien se haga cargo de la formación de los alumnos sin que pierdan el avance curricular y puedan estudiar en la misma ciudad donde lo estaban haciendo".
Además, dijo, podrán acceder a las becas y ayudas estudiantiles disponibles por el Estado.
Schmidt sostuvo que "estos jóvenes son recibidos como alumnos de Católica del Maule y garantizan su egreso, pero considera el plan formativo de la U. del Mar y egresan con título de la U. del Mar".
Los estudiantes de San Fernando tendrán clases en un inmueble facilitado por la Intendencia que era una sede de la Utem; en Curicó la U. Católica del Maule arrendará la misma sede que actualmente ocupa la U. del Mar, y en Talca se arrendará un colegio.
