"A partir del banco de preguntas, personalmente, como director, armo el examen. Esto no lo hace un comité. Obviamente es por motivos de seguridad. Me encantaría ayuda en esta etapa, porque es bien latosa, pero es mejor que haya una cabeza responsable y si hay una filtración a ese nivel, haya una persona a quien culpar".

Esta verdadera declaración de principios pertenece al doctor Beltrán Mena, director del Eunacom (Examen Unico Nacional de Conocimiento de Medicina), prueba que por ley rinden los médicos al final de sus estudios para postular al sistema público, atender por Fonasa y optar a especialización.

Son palabras de 2011, dichas ante académicos de medicina y registradas en un video que estos días circula entre alumnos que están empeñados en cobrarle la palabra: como si fuese una profecía, el test que el doctor Mena prepararía al año siguiente se filtró masivamente, y con escándalo.

Situación que por denuncia de él mismo es investigada por el sistema penal, y que desató sospechas cruzadas en el mundo académico.

Paralelamente, se avivan las críticas -principalmente, de alumnos agrupados en la Asociación de Estudiantes de Medicina de Chile (Asemech)- al proceso de elaboración del test y las inhabilidades que poseerían quienes participan del proceso, cuestionando el uso como herramienta de marketing que hacen las universidades que obtienen los mejores puntajes (ver recuadro).

"A eso de las 8 de la noche, nos enteramos que andaban circulando las preguntas..."

La noche previa al 12 de diciembre, día en que se realizaría el test polémico, médicos recién egresados de casi todas las universidades comenzaron a recibir y reenviar por mail, Twitter y WhatsApp, un pantallazo: "Posibles Eunacom 2012 (Medicina UDD)" era el encabezado. Contenía enunciados de temas con la respuesta correcta para cada uno.

Alumnos de la Universidad Católica del Norte se contactaron con la Radio Bío Bío y en forma anónima, a las 03:12:57 de la madrugada enviaron un mail denunciando que "a eso de las 8 de la noche nos enteramos por amigos de otras universidades que andaban circulando las preguntas que saldrían este año, nos llegó una fotografía en especial que se adjunta que proviene de la Universidad del Desarrollo con las preguntas de imagenología. No sabemos cuántas preguntas más se han filtrado".

Consultada la Universidad del Desarrollo por esta referencia, deriva a la información publicada en su web, descartando su participación.

El pantallazo no fue lo único que circuló esa noche. Egresados contactados por La Segunda dicen que antes se difundió un documento Word (de ahí habría salido la imagen), pero ninguno de ellos quiso mostrarlo.

Animo por Twitter... y por mail el detalle valioso

Por Twitter, el académico de la Universidad de Chile Javier Peralta -encargado de preparar a los estudiantes de esta casa de estudios para el test- envió el día 12, a las 02:15 AM, sus buenos deseos: "Exito a todas y todos quienes rinden el #EUNACOM hoy! Será un gran día!".

Pero, por mail, entregó a algunos información adicional: Varios consultados coinciden en haber recibido de él preguntas del test.

Egresados de medicina fueron a preguntarle posteriormente, y les explicó -según testimonios coincidentes- que "mandó los mails para explotar el asunto, para que todos se enteraran y dejarlo en evidencia".

«La Segunda Sábado» se contactó con el profesor: "Lamentablemente no estoy interesado en el tema", respondió.

En tanto, fuentes de la Universidad de Chile dicen que los antecedentes aportados por él permitieron porteriormente denunciar, con documentos, el tema ante la Asofamech.

Break en el test: "¡Las preguntas salieron!"

El descanso del test (son 180 preguntas divididas en dos bloques) rendido ese 12 de diciembre fue particularmente agitado. Quienes no habían recibido las preguntas comenzaron a ver que sus compañeros se pasaban sus celulares unos a otros, sorprendidos.

-¿Qué es eso? -preguntó uno.

-Son las preguntas de la prueba... Llegaron anoche y ¡salieron en la prueba!, le contestó el otro.

Algunos alumnos llamaron inmediatamente a sus facultades para alertar. La polémica comenzó a trascender.

Lo que dice la denuncia judicial

Dos días demoraron las autoridades de la Asofamech (agrupación de las facultades de medicina acreditadas y entidad de quien depende la Eunacom) en corroborar que la filtración de preguntas había sido real.

¿Dónde pudo ocurrir?

Según el reconocimiento público que hizo ese 14 de diciembre el presidente del organismo, el doctor Luis Ibáñez, además decano de la Pontificia Universidad Católica, fue en un momento muy particular del proceso: el comité de contenidos.

Explicaron entonces que la confección del examen tiene varias etapas: que las universidades mandan propuestas de preguntas, evaluadas por un comité técnico, que después pasan al comité de contenidos (que trabaja con médicos invitados de todas las universidades). De este "banco de preguntas" se seleccionan al azar 180, adoptándose resguardos en la etapa de impresión.

La Asofamech, descartó, sin embargo, que los que filtraron hayan sido miembros del comité permanente y apuntó a los "invitados". Junto a Beltrán Mena, Ibáñez dijo haber "podido precisar" que "la falta ocurrió en sesiones específicas del comité de contenidos, a partir de infidencias de los especialistas asesores invitados, no del comité propiamente tal".

Cuatro días después, la Asofamech presentó una denuncia ante la Fiscalía Centro Norte: Nada se dice ahí de estos agentes externos.

Por el contrario, según pudo conocer este medio, plantean otras posibilidades de la filtración: en el envío de las preguntas que hace cada universidad al inicio del proceso, en la comisión técnica o cuando la prueba estuvo "totalmente finalizada, burlando medidas de seguridad".

Pide perseguir una variedad de delitos: delito informático (por la posibilidad de que se hayan intervenido los computadores del Eunacom o el software de la base de datos); la Ley de Propiedad Intelectual; infidelidad en custodia de documentos, y, en grado de tentativo, estafa o fraude fiscal , dada la situación de privilegio en que quedarían quienes tuvieron acceso a las preguntas y podían correr con ventaja en la obtención de beneficios económicos del Estado.

La denuncia fecha la circulación de los correos e imágenes con las preguntas "la noche del 11 de diciembre". Reconoce que las 12 interrogaciones que ahí figuraban salieron en el examen real.

La investigación privada Mena

Esta semana y la anterior, el doctor Ibáñez, el doctor Mena y todos los decanos de medicina que participan en la Asofamech han guardado silencio. «La Segunda Sábado» intentó contactarse con los dos primeros, pero se excusaron de hablar hasta que termine la investigación. Los decanos, en tanto, adoptaron el acuerdo de que sería la institución la que hablaría con los medios.

La última declaración pública la realizaron el 21 de diciembre, cuando pidieron al Ministerio de Salud invalidar el test de este año (tema que debe zanjar Contraloría).

Pero silenciosamente, y pese a existir una investigación penal iniciada -ya fue designado el fiscal Marcos Mercado e incluso se dio orden de investigar a la Brigada del Cibercrimen de la policía de Investigaciones-, el doctor Mena intenta reconstruir la secuencia de comunicaciones y hallar así el origen del problema.

Según comentan varios egresados, el director de la prueba se ha contactado por mail con una decena de ellos, pidiéndoles precisión absoluta de la hora en que reenviaron la imagen con las preguntas, de quién la recibieron y cómo la obtuvieron .

«La Segunda Sábado» vio algunas de estas comunicaciones, donde, hace unos 15 días, Mena le explica a un médico que está intentando "reconstituir el mapa con el flujo de mails" que circularon ese 11 de diciembre. El mito dice que el doctor ya tiene en su oficina un pizarrón con un diagrama gigante que retrata la cadena de mails... al menos hasta donde por el momento ha podido llegar.

El paso a paso de la prueba, según Mena: "Corto las preguntas con tijera, en un trabajo manual" 
 
Además de ofrecer su cabeza en caso de filtraciones, en la exposición "Evolución del Examen Médico Nacional", el doctor Beltrán Mena explicó paso a paso la elaboración de la prueba y el rol que él jugaba.

Lo primero, dijo, es que los directores de carrera de cada universidad ingresan sus propuestas de preguntas a través de un software "que se llama buzón".

Polémico, comenzó de inmediato con las críticas: "Las preguntas de la prueba no han mejorado mucho a lo largo de los años, pero vienen de las escuelas y suponemos que ellas nos están mandando sus mejores preguntas, no las peores".

Aseguró también que "desde hace un tiempo, en realidad la donación (de las preguntas) la está haciendo el MIR español (examen que se hace en ese país), porque la cantidad de preguntas copiadas del MIR que nos están llegando alcanza a veces niveles vergonzosos... y no son buenas".

Comité corrige hasta " errores de redacción severos"

Ahí, aparece el primer comité, el técnico. Son ocho médicos de ocho universidades diferentes. "El comité técnico no inventa preguntas, pero las modifica todas, (porque) tienen errores de redacción severos, y además se ordenan de manera estándar para que el estudiante las entienda al tiro".

Las que aprueban van al comité de contenidos, integrado por 10 médicos, "miembros permanentes", representantes de universidades que no estaban en el técnico: "Las preguntas se revisan por paquete (cardiología, luego neurología, por ejemplo) y en cada una de ellas se hace entrar a 18 representantes de la especialidad, enviados cada uno de ellos por las escuelas".

El comité de contenidos rechaza "gran cantidad de preguntas. Si modifica alguna, vuelve al técnico. Las aprobadas por ambos comités pasan al banco de preguntas".

Sobre el "armado del examen final", explicó: "A partir del banco de preguntas que se generó, personalmente, como director del examen, armo el test, no lo hace un comité... Se hace una selección ciega a partir de las preguntas disponibles y mirando que se cumplan los números de preguntas requeridos por especialidad".

"Cuando llego al final, se arma un examen, lo imprimo, y corto las preguntas con tijera, en un trabajo manual , y las ordeno por especialidad y miro en paquete, qué sé yo, las 10 preguntas de cardiología, las 29 de obstetricia, las 29 de pediatría... y se miran en conjunto. Trato de evitar que la alternativa "D" de una pregunta le dé la pista del enunciado que le faltaba en la otra. Entonces, es una mirada como de conjunto, que no tiene método, es puramente de concentración e intuitiva y es bien difícil".

Finalmente, él mismo lleva el facsímil a la imprenta.