Las mujeres y el Nobel: Una relación peligrosa

Que Gabriela Mistral pertenezca al selecto grupo de mujeres condecoradas con el Nobel -menos de un diez por ciento del total-, es un hito. No sólo porque la Academia Sueca haya reconocido su extraordinaria capacidad poética, sino porque es la única que escribió en castellano. "Al parecer, es el sur el que no existe, porque sólo hay una italiana premiada y no hay francesas, españolas, portuguesas ni griegas.

Y no es que no haya grandes escritores en estas ricas y antiguas lenguas", escribe la lingüista Gloria Casanueva en la introducción. Así, nos introducimos en los retratos, bibliografía y perfiles que capturan con gran precisión las personalidades de Selma Lagerlöf, Grazia Deledda, Sigrid Undset, Pearl Buck, Nelly Sach, Wislawa Szymborska, Toni Morrison, Nadine Gordimer, Elfriede Jelinek, Doris Lessing y Herta Müller.

También se incluyen los momentos más trascendentes de su discurso de aceptación del premio. "¿Por qué se ha premiado mucho más a los hombres que las mujeres? No parece haber una respuesta simple, pero es evidente que hay una posibilidad que merece descartarse de plano. La del talento", escribe la autora. Acá está una prueba absoluta.

INTRUSAS EN ESTOCOLMO. Las mujeres y el Premio Nobel de Literatura. Por Gloria Casanueva. Liberalia Ediciones, 2012. Santiago. 150 páginas.

Un pintor secreto al descubierto

Si no sabemos tanto de Jim Mendoza Mac Ray es porque decidió encerrarse con sus tormentos pero también extraordinario talento. Nacido en Lebu en 1905, hijo de mapuche e irlandesa, terminó viviendo en Valparaíso donde comenzó a retratar a los personajes del barrio El Almendral. Y mientras ganaba unos pesos como obrero o pintor de brocha gorda, desarrolló una estética que terminaría fusionándose con esa tristeza y belleza de los que saben que un puerto no es para el turismo.

JIM MENDOZA. PINTOR DE ABISMOS. Por Marcela Küpfer C. y Carlos Lastarria H. Editorial Puerto Alegre, 2012. Valparaíso. 121 páginas.

Historias de heavy metal

Este es posiblemente el mejor libro de rock aparecido en mucho tiempo. Una colección de ensayos, entrevistas y artículos que abordan géneros "extremos", como el speed, death y thrash metal. Todo comienza en 1987 con una polera de Slayer que el periodista y escritor Patricio Jara usó hasta que "la tela negra se fue haciendo gris, luego transparente". Así nos introducimos en un mundo que bajo la reconocible estética pagana -que escandalizaba a tantos- escondía furia, disidencia y las guitarras más estimulantes de la historia. Hay referencias a la extraña aparición de Necrosis en Sábados Gigantes, reseñas de discos y recitales o una entrevista de Fuguet a Tom Araya, líder de los mismos Slayer antes de convertirse en la estrella de rock más importante chilena a nivel mundial.

PAJAROS NEGROS. Crónicas del heavy metal chileno. Por Patricio Jara. Ediciones B, 2012. Santiago. 214 páginas.