Pijamas de diseñador, tablets personales o cremas para la piel. Diseñadas para compatibilizar la comodidad y el trabajo, son especialmente demandadas por empresas, cuyos ejecutivos necesitan llegar descansados a reuniones de negocios el mismo día que llegan a destino.
Todas las compañías ofrecen asientos-cama.
Hace algunos años atrás, las primeras clases de las aerolíneas se diferenciaban por la mayor inclinación de sus asientos. Hoy eso es parte del pasado: todas cuentan con asientos-cama, por lo que la búsqueda por entregar el mejor servicio las ha llevado a ofrecer una serie de lujos y excentricidades que provocan que los pasajeros no quieran bajarse del avión.
Vajilla fina, vinos premium, menús de reputados chefs, pijamas de diseñadores y un sinfín de elementos tecnológicos predominan la oferta de las primeras clases de aerolíneas que llegan a nuestro país. Enfocadas a que los pasajeros descansen, pese a las largas horas de vuelo, y puedan llegar a sus destinos como si hubieran pasado la noche en el mejor de los hoteles. ¿Los precios? Un pasaje solo de ida desde Santiago a Europa promedia los 4 mil dólares.
La clase Premium cuenta con teléfonos satelitales para que el pasajero esté siempre conectado. El asiento se reclina hasta convertirse en una cama de dos metros que cuenta con edredón acolchado, ropa de cama y pijama. Los pasajeros reciben un tablet Samsung Galaxy Tab, donde pueden elegir películas, juegos y audio. Los auxiliares de vuelo también cuentan con tablets, que les informa sobre las preferencias de los pasajeros.
La aerolínea que volverá a operar en nuestro país a partir del 8 de diciembre, ofrece un sistema de entretenimiento personal a la carta, a través de un monitor táctil de 39 cm, que incluye más de 150 películas, 185 programas de televisión y 20 videojuegos. Su Business First incluye artículos personales para el cuidado de la piel marca Philosophy, además de almohadas y frazadas estilo duvet.
Sus asientos con acabados de cuero se reclinan en 180 grados e incluyen ropa de cama con almohadas y plumones de pluma. Para el entretenimiento, los pasajeros cuentan con una pantalla de alta definición con control remoto, y sus asientos están dispuestos de una forma que todos tienen acceso directo al pasillo.
A partir del 2015, la aerolínea holandesa incorporará su World Business Class, que se encuentra plagada de lujos: sus asientos fueron creados por la diseñadora holandesa Hella Jongerius; sus almohadas tienen dos caras: una de seda fresca y la otra de algodón blanco; las comidas se sirven en vajillas de Marcel Wanders y los pasajeros reciben un estuche con productos de belleza diseñado por el dúo holandés Viktor & Rolf.
En sus nuevos Boeing 787, los aviones más modernos de la flota, los asientos de la Premium Business cuentan con un sistema de memoria que graba la posición del asiento que el usuario elija, y producen masajes en la zona lumbar. En al ámbito gastronómico, el menú puede ser diseñado por el pasajero, seleccionando entre una variedad de platos preparados por el chef Hugo Pantano y vinos seleccionados por el máster sommelier Héctor Vergara.
