Investigación detectó desvíos de fondos incluso después que se terminó el contrato con CMR Falabella.
Una pena de cárcel efectiva de 5 años y un día solicitó el fiscal de la Unidad de Delitos de Alta Complejidad José Antonio Villalobos en contra del empresario Manuel Cruzat Infante; sus hijos José Luis y Nicolás, y los ejecutivos de sus empresas Eduardo Romo e Iván Rojas, a quienes acusó ante el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago del delito de apropiación indebida reiterada por una suma cercana a los US$40 millones.
Los ilícitos se habrían producido entre enero de 2009 y abril de 2012, cuando el portal de pagos Miscuentas.com -propiedad de Cruzat- desvió $21.516 millones correspondientes al pago de los clientes de CMR Falabella a una serie de empresas del grupo Cruzat y hacia las cuentas personales de algunos de los acusados.
En tanto, el abogado de CMR Falabella, Claudio Feller, quien al cierre de esta edición aseguró no conocer todavía la acusación del fiscal, adelantó que por su parte pedirán una pena de entre 10 años y un día y 15 años de cárcel.
En su investigación, la fiscalía desestimó uno de los principales argumentos de la defensa de Cruzat, que sostenía que en los contratos con Falabella se establecía el cobro de intereses en caso de demoras en el traspaso de los dineros, lo que fue interpretado como una luz verde para usar los dineros de Falabella para otros fines.
Sin embargo, uno de los antecedentes que tuvo a la vista el Ministerio Público para formular la acusación, fue que incluso después de que Falabella hiciera la denuncia y terminara su relación comercial con Miscuentas.com, hubo un traspaso de aproximadamente $5 mil millones de pesos hacia las empresas de Cruzat.
Entre las firmas que recibieron los dineros están Capitales, CB Corredores de Bolsa, grupo Marsella, Sociedad Agrícola Paredes Viejas, Curauma, Parques y Jardines La Luz, Cuatro Rutas, Sociedad Agrícola Los Prados, CB Networks, Cb.cl, Inmobiliaria Internacional, Sociedad de Inversiones Hernando de Aguirre, Miscreditos.com, Atacam y CB Consultoría y Proyectos.
Entre los medios de prueba hay 50 testigos, 500 documentos que incluyen correspondencia electrónica entre los imputados, personal de CMR y comunicaciones entre personal del grupo económico que no están acusados, donde se dan cuenta de los requerimientos de pagos, planillas con platas faltantes, etc.
El fiscal Villalobos confirmó la información y dijo que "efectivamente el día de hoy se presenta la acusación. Se trata de delitos reiterados de apropiación indebida y el fraude es cercano a los US$40 millones".
Los peritajes realizados en el caso, especialmente el que realizó la auditora KPMG para descifrar el destino de las platas, también serán incluidos entre los medios de prueba, junto a otros documentos que dan cuenta de las distintas sociedades, sus integrantes, juntas de accionistas y reuniones de directorio.
Personal de Falabella y personas que tuvieron conocimiento de las transacciones -entre ellas ex funcionarios de Cruzat- también será citados a declarar.
Desde que estalló el caso, la defensa de Cruzat ha insistido en que se trata de un incumplimiento comercial que debiera ser visto en la justicia civil y no en la penal, y que no ha habido apropiación indebida, sino una deuda que ha sido reconocida y sobre la cual existe el compromiso de ser cancelada.
El socio principal de Inverfaz, compañía que asesora al empresario, Rafael Fazio, insistió hoy en que el uso del dinero por un espacio de tiempo y la restitución posterior siempre "fue la forma en que operó el contrato con CMR Falabella".
Sin embargo dijo que la acusación "nos acomoda, porque ahora tanto la fiscalía como Falabella tendrán que probar los hechos por los cuales acusan. Ahí deberán demostrar, entre otras cosas, que se trata de una causa penal y no civil, como hemos sostenido nosotros".
En qué está hoy el empresarioOficina en el centro y proyectos inmobiliariosFuentes cercanas a Cruzat aseguran que el empresario está reorganizando los activos que aún posee, con miras a estructurar una nueva malla de sociedades para, desde ahí, retomar su participación en la industria inmobiliaria.
Para ello se habría instalado con una oficina en pleno centro de Santiago, a la que va prácticamente todos los días.
