Sin embargo, apoya indicaciones que buscan asegurar el suministro de agua para satisfacer necesidades básicas y contra el acaparamiento.
A dos semanas del ingreso de las indicaciones sustitutivas para reformar el Código de Aguas al Congreso, el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Patricio Crespo, presentó hoy por primera vez la postura oficial del gremio con respecto a los cambios que impulsa el gobierno para modificar la normativa actual, vigente desde 2005.
En el Encuentro Nacional del Agro 2014, el dirigente repasó el futuro de la agricultura y analizó si están las condiciones para que el sector siga creciendo, en vista de la inquietud e incertidumbre de los productores ante los efectos de las reformas.
Sobre el Código de Aguas, si bien Crespo identificó propuestas "aceptables", dijo que "lo que me parece inaceptable es que se pretendan crear nuevas concesiones con severas limitaciones. Nos parece que es inconstitucional. También se consideran limitaciones al ejercicio de los derechos vigentes, limitaciones que van más allá" de lo que dicta la Constitución, afirmó. Asimismo, indicó que "de acuerdo a los expertos, las reformas que se proponen estarían anunciando la intención no declarada de cambiar el estatuto jurídico de los derechos de aprovechamiento vigente".
Por esto, dijo que "nuestra propuesta alternativa busca evitar la polarización y consecuente paralización del agro", convocando a las diversas instituciones al diálogo.
Según fuentes de la SNA, en su discurso principal que presentará esta tarde, Crespo daría fuerte énfasis al Código de Aguas, planteando que a pesar de que se ha expuesto que los problemas asociados a la escasez hídrica podrían resolverse reformando la Constitución y el Código de Aguas, sí se cuenta con una institucionalidad adecuada que, sin duda, puede ser perfeccionada.
Sobre el proyecto, afirmaría que es necesario hacer distinciones entre las indicaciones que se han introducido. En ese sentido, la SNA apoyaría las que procuran asegurar el suministro de agua para satisfacer las necesidades básicas de la ciudadanía y velan porque el recurso se utilice bien y no sea un factor de acaparamiento para especulación, porque van en la línea de perfeccionar la institucionalidad vigente.
Sin embargo, manifestaría reparos a limitar el ejercicio de los actuales derechos de aprovechamiento así como la introducción de concesiones temporales.