En el caso de las localidades de Los Canelos y Las Candelarias, ubicadas a 45 minutos de Chépica y los habitantes que allí residen no cuentan con la infraestructura necesaria para poder potenciar sus negocios. Por esta razón, el Gobierno Regional a través de su Programa De Infraestructura Rural para El Desarrollo Territorial (PIRDT) junto a FOSIS (Fondo de Solidaridad e Inversión Social), se encuentran realizando diversas acciones para potenciar el desarrollo productivo de comunidades rurales, cuyas limitaciones o carencias de infraestructura sumado a la falta de técnicas de diseño y de comercialización,  generan un obstáculo para su productividad o la rentabilidad de sus emprendimientos.

Es así como diez tejedoras recibieron ayuda estatal consistente en la construcción de nuevos talleres para trabajar y exponer sus productos, en cursos de emprendimiento y asistencia técnica de especialización en el oficio del telar contemporáneo. Gracias a esto, las artesanas pudieron aprender sobre nuevas técnicas de tejido y a teñir la lana con productos naturales, como por ejemplo usar la betarraga para teñir en rosado, además de fijar los precios acorde al tiempo y trabajo realizado.

“Este tipo de iniciativa que realiza el FOSIS y el PIRDT, sin duda es un aporte a la hora de  aminorar las brechas existentes y que dificultan el desarrollo sociocultural y económico productivo de los territorios más aislados de nuestra región. Los habitantes de estos lugares no tienen los recursos para emprender, por eso es muy importante la ayuda que se les está entregando ya que así podrán potenciar sus negocios, lo que claramente mejorará su calidad de vida”, señala la intendenta de la Región Morin Contreras.

Aislamiento

Rosalía Abrigo Muñoz vive en la localidad de Los Canelos a 45 minutos de Chépica y su  vivienda está ubicada en un sector de difícil acceso, sin camino que transiten vehículos y en pendiente. Debido a esta situación solo se puede llegar caminando. Ella teje e hila lana de oveja desde hace más de treinta años, pero presenta una gran dificultad a la hora de vender sus productos, principalmente porque no cuenta con un lugar de trabajo y sus tejidos la mayoría de las veces se ensucian debido al exceso de polvo que hay en el lugar.

Sin embargo, gracias a la ayuda gubernamental que recibió y a la participación de voluntarios del municipio de Chépica, profesionales de Prodesal, de FOSIS y del Gobierno Regional; que llevaron los materiales caminando y en mula hasta su vivienda; se logró construir una infraestructura para que ella pueda realizar su trabajo en mejores condiciones.

En este caso el aporte estatal consistió en 400 mil pesos con un cofinanciamiento del 10 % de parte de las beneficiarias, con el objetivo de que puedan mejorar sus condiciones de vida y fortalecer sus capacidades.

“Yo me dedico a hilar, a vender los hilos y también tejidos. Estoy muy contenta con la ayuda que me están dando, porque yo sé que cuesta que me la hagan llegar porque vivo muy lejos,  es primera vez que me ayudan de esta forma y estoy muy agradecida Este nuevo taller me ayuda a implementar mi telar, guardar las lanas y herramientas para el hilado”, comentó la señora Rosalía.

Cabe destacar que esta iniciativa no solo está dirigida a las artesanas de lana de oveja, sino que también a pequeños productores que se dedican a la producción de huevos, miel, flores, hortalizas y carnes y,  que habitan en distintas localidades rurales  de  las comunas de San Fernando, Chimbarongo y Placilla. Se espera que con la ayuda que se les está entregando a los usuarios de este programa, ellos puedan ampliar sus negocios y mejorar sus ventas.