Un factor determinante es la recuperación de la economía.
Santiago.-En medio de la marcada desaceleración de la economía, el dólar aún no toca techo y puede seguir subiendo, tras anotar máximos de más de cinco años.
Ese es el análisis que hacen algunos analistas que incluso sitúan la divisa en 600 pesos a fin de año si persisten la turbulencias externas y las señales de recuperación de la economía estadounidense.
Otros expertos estiman que el tipo de cambio tendría ya poco espacio que ceder.
En lo que va del 2014, el peso acumula una caída del 9,37% frente al billete verde, tras una depreciación del 9,01% el año pasado.
"La debilidad de la economía local, que ha sido más profunda, es consistente con un tipo de cambio más arriba (mayor depreciación del peso)", dijo el subgerente macroeconómico, portafolio y mercado del grupo financiero local Security, César Guzmán.
A principios de esta semana, el instituto emisor informó que el Producto Interno Bruto (PIB) creció un 1,9% en el segundo trimestre, su menor desempeño desde la recesión del 2009. La debilidad se replicaría en el tercer trimestre.
"El peso seguirá depreciándose si la economía no se recupera", dijo el analista de 4Cast, Pedro Tuesta.
Para estimular a la economía, el Banco Central ha recortado la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 150 puntos base desde octubre, lo que ha restado atractivo al mercado de renta fija y ha alejado a inversores extranjeros, en medio del pobre desempeño de la bolsa y el fortalecimiento global del dólar.
En lo que va de agosto, el peso ha caído un 1,45%, situando el dólar en 580 unidades, mientras que hace un año la moneda se ubicaba en 514 pesos.
"Se observa una depreciación generalizada de las monedas respecto al dólar. Sin embargo, durante agosto, el peso chileno lo ha hecho un poco más, anticipando una política monetaria más expansiva", dijo un informe del grupo Santander Chile.
"El tipo de cambio debiese tener una expansión acotada, en línea con los ajustes a la TPM", agregó la entidad.
Pedro Tuesta agrega que "en este momento no hay mucha aversión al riesgo y eso está deteniendo la depreciación. Si la aversión al riesgo regresa, sea por asuntos geopolíticos o porque los datos de Estados Unidos muestran que la Fed puede subir la tasa antes del tercer trimestre del 2015, entonces el peso se moverá fácilmente a 600", dijo.
Por su parte, el economista jefe de Scotiabank, Benjamín Sierra cree que "si se dan las bajas de tasas como el mercado las está esperando en Chile y (continúa este año) la mantención de tasas en Estados Unidos, el impacto sería marginal sobre el tipo de cambio (...) Podría haber un impacto, si hay movimientos de tasas en Chile o el extranjero que fueran bruscos o mucho más intensos de lo que el mercado prevé", agregó.
