Si bien el Gobierno dejó el proyecto para fines de año, en la Alianza desde antes están preocupados del tema.
Para el presidente de RN, Cristián Monckeberg, "hay que buscar otras respuestas además del pleno empleo, que incluya mejores condiciones laborales". Y por ello instruyó al Instituto Libertad a preparar una propuesta basada en los principios de la centroderecha, la libertad individual, pero que sea "ingeniosa, lejos del «cosismo» y que compatibilice el trabajo con la vida familiar". El documento está en plena elaboración y ya ha habido entrevistas con dirigentes sindicales y del mundo académico.
En RN no desean que se elimine el reemplazo en la huelga; dicen que se podría llegar al extremo de que una empresa quiebre. Sobre la ampliación de la negociación colectiva, sostienen que no se puede coartar la libertad de un trabajador de negociar por su cuenta.
Además, el documento aludirá a que "el Estado es el peor empleador", "porque tiene gente trabajando por mucho tiempo a contrata o a honorarios". A dicho estudio se sumará uno que prepara Nicolás Monckeberg con abogados de centroderecha y centroizquierda.
A su vez, los senadores Andrés Allamand (RN) y Hernán Larraín (UDI) pretenden trabajar en conjunto de la misma manera que se hizo con la reforma tributaria, con equipos técnicos y políticos de ambos partidos.
El presidente de la tienda gremialista, Ernesto Silva, resaltó: "Desde un escritorio estatal se quiere quitar los espacios de libertad de elegir que tienen los trabajadores. Existe una diferencia central con la izquierda en la visión que hay sobre el trabajo".
Según fuentes de la Nueva Mayoría, en cada reunión del comité político y los presidentes de partido, el timonel PS, Osvaldo Andrade, ha sido insistente en preguntar por la suerte de la reforma laboral y desde el Ejecutivo se le ha contestado: Se pondrá en la agenda en el último trimestre. Asimismo, que no sólo dependerá de cómo se resuelvan las conversaciones de la ministra del Trabajo con CUT y CPC; será decisivo el ministro de Hacienda (PS).
Sobre los contenidos, no existen precisiones y se espera la señal del Gobierno. Entre otros temas sobre eliminar o no el reemplazo de los trabajadores en huelga, sobre el que, en primera instancia, se advierten al menos matices.
Por ejemplo, fuentes del socialismo plantean que el marco establecido en el programa de Gobierno les resulta "satisfactorio". El texto no menciona expresamente el fin del reemplazo.
"El protocolo que firmó la CUT con la CPC es un referente nomás. El Gobierno debe tener su propia propuesta", remarca Tucapel Jiménez (PPD), presidente de la comisión de Trabajo de la Cámara. Y así como en la reforma tributaria, el parlamentario dijo cuál es a su juicio el "corazón" de la laboral: fortalecer los sindicatos, la negociación, la titularidad sindical y el famoso fin al reemplazo en la huelga". Y sobre este punto, enfatiza: "Sería incomprensible que ese tema no esté" y "sería absurdo haber ganado la elección, y gobernar con las ideas de la derecha".
"No tenemos ninguna señal oficial", afirma Patricio Vallespín, integrante DC de la comisión de Trabajo de la Cámara, quien espera tener "luces" y también aboga por "un derecho a huelga efectivo".
