En fallo unánime el máximo tribunal favoreció reclamo de la Fiscalía Nacional Económica.
La Tercera Sala de la Corte Suprema dispuso esta mañana que el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) reabra la tramitación del denominado caso Transbank, que a requerimiento de la Fiscalía Nacional Económica (FNE) busca determinar la eventual concertación de un grupo de bancos para no competir en el mercado de la administración de tarjetas de crédito y afiliación de establecimientos comerciales a estos plásticos.
En su fallo, el máximo tribunal del país acogió por unanimidad un recurso de hecho presentado por la FNE contra el Tribunal de la Libre Competencia luego que éste declarara inadmisible una investigación relacionada con la operación existente entre la banca y Transbank.
La Tercera Sala de la Corte Suprema determinó que el TLDC excedió sus atribuciones al declarar la inadmisibilidad de la consulta (o investigación) planteada por la FNE, bajo el argumento de que el tema debía ser resuelto mediante un proceso contencioso.
Sin embargo, la Suprema señaló que el TDLC no consideró los contenidos de fondo esgrimidos por la FNE y puso fin al caso aferrándose a una mera lectura literal y errónea de la legislación antimonopolios.
Este caso involucra al menos a siete bancos, entre ellos: BCI, BancoEstado, De Chile, Santander y BBVA, como operadores y accionistas de Transbank. Precisamente a requerimiento de estas cinco entidades el TDLC determinó cerrar el caso -pese a llevar cuatro meses de avance-, amparándose en que había ingresado a tramitación de manera errónea (bajo la forma de una "consulta" y no de una "causa contenciosa").
La Corte Suprema dijo que analizando el fondo de los antecedentes "la resolución reclamada importa una forma anómala de término de la gestión" por parte del TDLC.
La sentencia del máximo tribunal fue dictada por los ministros Rubén Ballesteros, María Eugenia Sandoval y Carlos Cerda; además de los abogados integrantes Ricardo Peralta y Arturo Prado.
Este último aclaró que si bien "efectivamente trabaja como asesor en la Fiscalía del BCI, este banco no era parte del recurso de hecho interpuesto" en la Corte Suprema por la FNE contra el TDLC, de manera que en lo formal "no tenía ninguna causal de inhabilidad para excusarse de entrar a conocer esta causa y tampoco las partes plantearon inhabilidad alguna teniendo el perfecto derecho a hacerlo antes de la audiencia".
Al reabrirse este caso en los próximos días en el TDLC la FNE insistirá en su posición en cuanto a que revise si la autorización con que cuentan los bancos -dictada en 1991 por la antigua institucionalidad antimonopolios chilena- para actuar conjuntamente, a través de Transbank, en los servicios de compra con tarjetas en establecimientos comerciales, infringe las actuales disposiciones para la libre competencia y, en tal sentido, les fije nuevas condiciones de actuación en el mercado.
Fuentes ligadas al caso señalaron que uno de los aspectos a los que apuntaría la FNE es que se le fije una cuota máxima de mercado a Transbank, en torno a 30% de participación, con el propósito de obligar a los bancos a competir en este mercado, ya sea a través de infraestructura propia o de terceros, y asimismo se facilite el ingreso y participación de nuevos actores en estos servicios, como es el caso, por ejemplo, de Multicaja.
La posición de la FNE se sostendría en el hecho de que bajo los actuales avances tecnológicos, la infraestructura que opera Transbank (redes, POS, data centers) no es de carácter crítico y, por el contrario, es de uso y acceso masivo por parte de otras empresas y servicios, de manera que no existirían condiciones de mercado para otorgarle a la banca el poder de actuar de manera conjunta y aliada en un mercado de uso masivo como el de las transacciones en el comercio a través de tarjetas de crédito.
30%de cuota de mercado propondría la Fiscalía Nacional Económica para Transbank, de modo que más actores puedan competir.
