El director del organismo, Michel Jorratt aseguró que nadie pagará más impuestos por errores de cálculo.
Michel Jorratt defendió la aplicabilidad de la renta atribuida
Foto MANUEL HERRERA
Se tratará de un sistema más amigable, donde nadie pagará más impuestos por errores y con él los accionistas tendrán más información sobre las sociedades relacionadas a la firma en la que tienen sus papeles, fueron algunas de las promesas con que el director del Servicio de Impuestos Internos, Michel Jorratt, defendió la renta atribuida ante la Comisión de Hacienda del Senado, la cual es blanco de ataque por parte de los críticos a la reforma tributaria.
"En caso de sobreestimar la atribución, el contribuyente recibirá mayores devoluciones (de impuestos)", dijo.
Agregó que este tipo de casos se podría dar cuando alguien participe de una empresa con muchas capas societarias, las cuales sólo representarían al 15% de los tenedores de papeles.
Señaló también que el sistema sería fácil de operar: se basará en un par de declaraciones juradas de las empresas para conocer quiénes son sus dueños, en qué porcentaje y cuántas utilidades les corresponden.
El proyecto contempla subir esa información a la página web del servicio y sobre esa base el SII realizaría una "propuesta" de declaración de impuestos, a ratificar por la compañía, la que a su vez debiese enviar el correspondiente detalle a las personas.
Jorratt también descartó que las empresas deban esperar a que declaren las anteriores en sus capas societarias, para luego hacerlo ellas, lo que podría demorar el proceso y haría imposible cumplir con los plazos establecidos.
Explicó que SII procesará la información de toda la cadena en forma "simultánea" para luego se validarla, por lo que, en sus palabras, "con esto la atribución es totalmente factible".
El directivo además insinuó que con la renta atribuida algunas compañías podrían simplificar sus estructuras, pues ciertas sociedades no producirían "valor agregado", al ser sólo fruto de la "planificación tributaria".
Al cierre de esta edición Jorrat explicaba por qué, en su concepto, "los registros del nuevo sistema serán menos complejos", abordando así las críticas de tributaristas de la plaza.