Asegura que la última ola de protestas no pone en entredicho el modelo. "Personas bajo criterios políticos propios del marxismo jamás aceptarán la presencia de una economía libre".
Sus "discípulos" -entre los cuales se encuentran economistas y empresarios-, lo recordaron este martes en un seminario en Casa Piedra. Hasta ahí llegaron el consejero del Banco Central Sebastián Claro, el ex ministro de Hacienda e Interior y presidente de Libertad y Desarrollo Carlos Cáceres, el decano de la Facultad de Economía y Administración de la Universidad Católica Francisco Rosende, el ex ministro de Economía Juan Andrés Fontaine, los empresarios Nicolás Ibáñez y Álvaro Saieh, entre otros, todos invitados por el economista Rolf Lüders quien organizó el seminario. En la ocasión recordaron el legado de Friedman y compartieron anécdotas sobre el economista.
"Hay reconocimiento a los beneficios de los mercados libres"
Pese a no haber estudiado en Chicago, Carlos Cáceres compartió con La Segunda su visión sobre el legado de Friedman a quien conoció en la Sociedad Mont Pelerin, Suiza.
-¿Cuánto de las ideas de Friedman es posible advertir en la política económica que se aplica en el gobierno de Piñera?
-Los fundamentos de la política económica obedecen a aquellos impresos en 1973 al momento en que el Gobierno Militar resuelve dar inicio a una nueva estrategia económica fundada en la consecución del valor moral de la libertad con su derivado económico de iniciativa privada, libre empresa y rol subsidiario del Estado. Estas ideas matrices con algunas modificaciones que no alteran sus carácteres principales se mantienen en los gobiernos de la Concertación y por supuesto en el del Presidente Piñera. Hay un reconocimiento a los beneficios de los mercados libres. En la reforma tributaria que se debate hoy se ha propuesto culminar la apertura de la economía chilena al proponer una rebaja en los aranceles para llegar al 0%. En sus aspectos sustantivos puede concluirse que las ideas de Friedman siguen vigentes.
-Medidas como la reforma tributaria o la polémica por los estacionamientos, ¿se alejan del pensamiento de Friedman?
-En la perspectiva del pensamiento de Friedman considero que, previo a pensar en una reforma tributaria destinada a incrementar los ingresos fiscales lo cual está asociado a un crecimiento en la participación del Estado en la economía, éste habría merecido serios reparos y se habría planteado la pregunta si no sería más conveniente hacer una evaluación objetiva de los destinos alternativos que presenta el gasto público y si ellos están revestidos de un carácter de eficiencia. Respondida esa interrogante habría evaluado la posibilidad de una redistribución en el gasto dándole entonces prioridad a aquel vinculado con la educación. En cuanto al tema del cobro de los estacionamientos es una medida absurda que atenta a los criterios de propiedad privada que en el pensamiento de Friedman y en la base del pensamiento liberal constituye uno de los pilares de la economía libre.
-Las protestas que se han visto en el último tiempo, ¿ponen en entredicho el modelo?
-La palabra entredicho creo que no corresponde a la realidad que hoy se presenta en el país. No cabe duda que personas bajo criterios políticos propios del marxismo jamás aceptarán la presencia de una economía libre. Lo que observamos en las protestas es un sentir no mayoritario respecto a ciertos aspectos muy concretos vinculados a la política social, pero no los considero que sean atentatorios a los conceptos fundamentales que ilustran una economía de mercado.
-Esta corriente de pensamiento suele acusarse de ser insensible ante la desigualdad.
-No tengo dudas que en el fundamento de la concepción de una economía libre deben implementarse políticas destinadas a reducir los niveles de pobreza y buscar una mejor distribución de los ingresos que parte por generar las condiciones para una igualdad de acceso a las oportunidades. La causa principal de la disminución de la pobreza que observamos, como también la tendencia a mayores equilibrios en cuanto a la distribución de ingresos, ha estado en el alto crecimiento que ha experimentado la economía nacional en los últimos años asociado a una significativa mayor creación de empleos.
-¿Hacen los Chicago Boys chilenos, o usted, alguna autocrítica al modelo o su aplicación en Chile?
-Mi autocrítica personal está orientada a no aprovechar las oportunidades para profundizar en los aspectos vinculados a una auténtica economía libre. En el plano de la macro economía siento ausente tareas muy importantes como lo son la modernización del Estado, el abrir los espacios a la propiedad privada, total o parcial, en las empresas del Estado y en el nivel microeconómico el conjunto de medidas que propusiera el ex Ministro Fontaine, en cuanto a mejorar los niveles de competitividad de las empresas chilenas.
