Serán dos termoeléctricas: Santa María de Colbún (343 MW) entrará al sistema en julio, mientras que Bocamina II de Endesa, pese a las protestas en la zona, partiría entre septiembre y octubre.
Lugareños siguen hoy enterrados en el vertedero de cenizas de Bocamina II en protesta contra Endesa.
Foto UPI
Y mientras que desde Santiago hacia el norte expertos señalan que "no hay soluciones hasta 2018" en términos de nuevos proyectos, según Francisco Aguirre, de Electroconsultores, hacia el sur hay dos termoeléctricas que comenzarán a operar este año y que entre ambas aportarán cerca de 700 MW al Sistema Interconectado Central (SIC), ambas en Coronel.
Una es Santa María, de Colbún, con capacidad de 343 MW y que por estos días está realizando pruebas de inyección al SIC, en las que está cerca de su capacidad máxima.
Desde la compañía señalaron que estas pruebas se extenderán por algunas semanas más, pero que el objetivo es dar inicio a las operaciones durante el mes de julio.
El caso de Endesa y su central termoeléctrica de Bocamina II en Coronel se mantiene complicado, ante el conflicto que sostiene con la gente del lugar y que los tiene en mesas de negociación desde diciembre.
Según cercanos a la empresa, la planta, que tendrá capacidad de generación de 350 MW e implicó una inversión cercana a US$800 millones, hoy se encuentra en pruebas de servicio desde diciembre, que avanzan según el cronograma establecido. Restan los últimos detalles por lo que podría comenzar a operar entre septiembre y octubre de este año.
Desde Endesa señalan que están en mesas de trabajo con los pobladores y recordaron que hasta ahora han erradicado a más de 390 familias de la zona. Pese a ello, admiten que los últimos incidentes, que incluyen lanzamientos de bombas molotov y el grupo de personas que siguen hoy enterradas en el vertedero de cenizas de la planta, podrían atrasar la apertura de la planta, aunque no han estimado cuánto.
Cuatro proyectos mineros afectados
Preocupación mostró el presidente ejecutivo del Consejo Minero, Joaquín Villarino, por la situación de Punta Alcalde, ya que afirmó que "significa mayores precios por menor oferta, y las compañías mineras tendrán que comprar energía a precios que no son de contratos a largo plazo".
Villarino señaló que hay cuatro proyectos que serán afectados específicamente por este proyecto, debido a la escasez de suministro eléctrico que habrá a partir de 2017: El Relincho de la canadiense Teck, Pascua Lama y el depósito de oro y cobre Cerro Casale de Barrick, además del proyecto Caspiche, de extracción de oro de la inglesa Exeter Resource Corporation.
El ejecutivo afirmó que en vista de Punta Alcalde, Castilla, Barrancones, Hidroaysén y otras situaciones, Chile "no está siendo capaz de solucionar su problema eléctrico, por lo que tendremos fuentes más caras y contaminantes, como el petróleo. Dejará de ser tan atractivo para invertir, y tendrá una energía más cara que hoy, por lo que las empresas emigrarán a países más competitivos".