El socio de CGE, Jorge Marín Correa, es quien participa en más directorios: 9. Le siguen Bernardo Matte y Baltazar Sánchez, ambos con 7. 31% son ingenieros comerciales, 44% tienen un MBA y 49% estudió en la UC. El que más paga es Quiñenco y el que menos, Quemchi.
Y es que las millonarias multas que la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) ha cursado contra más de 20 directores -primero a los miembros de la mesa de Fasa por el bullado caso colusión de las farmacias y, segundo, contra los ex directores de La Polar- han generado críticas acerca del verdadero rol que cumplen en las compañías en Chile.
Para muchos expertos, estos hechos marcarán un antes y un después en la forma de ejercer el cargo de director, y también una disminución en su atractivo: ahora los eventuales candidatos lo meditarán más antes de aceptar un sillón que hasta hace poco era muy apetecido, coinciden.
Esta opinión la comparte Max Vicuña, socio de Amrop MV Consulting, empresa head hunter que cada año realiza un completo estudio sobre el estado de situación de los directores en Chile: quiénes son, cuáles se repiten más, qué estudian y cuánto ganan, entre otros aspectos. Eso sí, el consultor precisa que no está de acuerdo con que estos hechos hayan provocado un cuestionamiento a todos los directores de nuestro país.
El escenario de los directorios, dice Vicuña, "ha permanecido bastante estable en los últimos años", pero sin duda cambiará en las próximas juntas de accionistas: "Acontecimientos ocurridos en 2011 dejaron al descubierto la fragilidad que existe en algunas empresas en relación a su gobernabilidad y al rol que deberían haber cumplido sus respectivos directores", señala el informe.
Los que más se repiten
El estudio de Amrop se realiza con la información publicada en la SVS, entregada por las 124 sociedades anónimas que forman parte del IGPA y el grupo de 40 empresas del IPSA vigentes para el año 2010.
Uno de los aspectos que aborda es el de los nombres que más se repiten en los directorios.
En las empresas IGPA, el que encabeza la lista es el controlador de la eléctrica CGE, Jorge Marín , quien participa en 9 directorios (además de CGE está en CMPC, Detroit, Elecda, Eliqsa, Emelari, Gasco, Indiver y el grupo Security).
Lo siguen el empresario socio de Colbún, CMPC, banco Bice, Bernardo Matte, y uno de los hombres fuertes del grupo Claro, Baltazar Sánchez , ambos con 7 participaciones en mesas directivas.
Con 6 directorios están José Luis Hornauer, Gonzalo Ibáñez, Guillermo Luksic y Leonidas Vial.
En las empresas IPSA, la lista la encabezan Andrónico y Guillermo Luksic , ambos con 4 directores, entre los cuales están Quiñenco, Banco de Chile y CCU.
Pero esa no es necesariamente la situación de todos los directores de empresas. Actualmente, dice el estudio, un 75% de los directores del IGPA participan solo en una mesa, el 15% en dos, el 5% en tres y 5% en cuatro o más.
Dicho de otro modo, las empresas IGPA cuentan con 936 sillones, ocupados por 639 personas. Vicuña agrega que "el estudio sólo considera las empresas abiertas, por lo tanto no son necesariamente todos los directorios en los que participan estas personas".
¿Más abogados en el futuro?
En cuanto a los estudios, 31% de los directores del IGPA son ingenieros comerciales ; 24%, ingenieros civiles y 13%, abogados .
De ellos, 49% estudió en la Universidad Católica , 38% en la U. deChile , 4% en la Adolfo Ibáñez y 9% en otras universidades.
Además, 13% cuenta con estudios de doctorado , 44% con MBA , 38% con un master y 5% con un diplomado .
Una de las tesis del estudio señala que los cambios en el mercado han obligado a incluir en los directorios profesionales de perfiles más específicos. De hecho, dice el informe, "no sería de extrañar que los abogados tuvieran mayor presencia, considerando que los nombres que se han incorporado en los primeros dos meses de este año 2012 al Registro de Directores de las AFP, cerca de la mitad de ellos pertenecen a esta profesión".
Luksic, el más "generoso" con sus directores
A la hora de analizar cuánto ganan y cómo les pagan, no hay una sola mirada en Chile. De hecho, uno de los aspectos que en opinión de Vicuña seguramente vivirá un cambio en los próximos años, es la profunda diferencia de compensaciones que existe en los directorios nacionales.
Vamos a los datos. Si se observan las empresas IGPA, la mediana en sueldos es de casi $21 millones al año por director; es decir, $1.750.000 mensual. En el IPSA, la mediana es de casi $30 millones.
No obstante, si se observa la compañía que más paga, Quiñenco del grupo Luksic, cada director recibe $239 millones anuales, es decir, casi $20 millones mensuales. En una situación parecida está otra empresa de los Luksic, CCU ($232 millones anuales por director) y la eléctrica CGE ($230 millones anuales por director).
En cambio, en la otra esquina la compañía que menos paga es Quemchi , del grupo Claro, que entrega unos simbólicos $239 mil anuales por director, unos $20.000 mensuales. En la misma situación están Vapores , que paga $1.295.000 anual, y Tricahue , con $1.187.000. Eso sin considerar que hay 13 sociedades que no remuneran a sus directivos.
Según Vicuña, "no existe ninguna razón para tanta dispersión en los sueldos". Por lo mismo asegura que esta disparidad debiera ser uno de los puntos que cambie en los próximos años, principalmente porque los directores deberán evaluar el nuevo escenario de más exposición, "donde los niveles de dedicación y de compenetración con sus respectivos directorios aumentará significativamente". Agrega, además, que espera que se genere un cambio en los "criterios de remuneración, que considere una lógica económica y criterios de mercado".
Para el consultor, las multas aplicadas a los directores en el caso La Polar -que en la gran mayoría fueron por no actuar con la debida diligencia- han obligado a quienes ocupan estos puestos a considerar "un escenario mucho más demandante, donde las contingencias pueden quedar a la vista". Todo eso, agrega Vicuña, debiera generar un aumento en las remuneraciones. "Si no, quizás para muchos va a dejar de ser atractivo".
También debiera haber cambios en la forma de remuneración (ver cuadro). En Chile, las dietas (pago por asistencia) y remuneración fija representan un 50% de la compensación total de directores de empresas IGPA.
"Estas modalidades de compensación, al constituir un pago fijo que no está indexado ni a la gestión realizada ni a los resultados obtenidos por la empresa, podría contener incentivos que no están necesariamente alineados con la creación de valor para la empresa", afirma el estudio. A su vez, menciona que el remunerar a través de participación en utilidades también puede tener inconvenientes.
AFP: Registro de inscritos cae por primera vez
Uno de los hechos que demuestran que estos cambios ya empiezan a notarse, dice Vicuña, está en el listado de inscritos en el Registro de Directores de las AFP, el cual todos los años, desde su creación, ha vivido un aumento sostenido (ver gráfico), pasando de 26 personas el 2008 a 356 el 2011.
No obstante, estos últimos dos meses, la cifra de inscritos cayó de 363 a 351, justo después de conocida la resolución de la SVS en el caso La Polar. "Ese es un hecho concreto. Los directores deberán prestar más dedicación a sus funciones, tendrán que pensar bien en cuáles y en cuántos directorios van a participar, y por lo tanto, quizás algunos han decidido dejar este registro", sostiene Vicuña.
Según el informe, otro de los cambios que se podrían observar a partir de las próximas juntas de accionistas, es que se incremente el número de directores independientes respecto de años anteriores, "ya que se ha producido un acercamiento entre distintos inversionistas institucionales, donde además de las AFP están los fondos mutuos, fondos de inversión y compañías de seguros, entre otras, con el propósito de aunar esfuerzos y tener más representatividad en los directorios, juntando una mayor cantidad de votos", señala el informe.
Según las estimaciones de Amrop MV, este actuar conjunto de los distintos inversionistas institucionales le permitiría a las AFP contar con más del doble de los directores que les correspondería al actuar aisladamente. Y este hecho sería aún más pronunciado en los inversionistas institucionales no AFP.