Arnon Kohavi partió a Singapur con su fondo de riesgo, Yarden Ventures. "No es el momento para crear un gran fondo en Chile (...) En 10 años, este lugar será completamente diferente", afirma.
"Cuando sienta que mi presencia tiene sentido, volveré, incluso a vivir", dice el israelí.
Foto FABIAN ORTIZ
"El próximo Skype, Facebook o Mercado Libre tiene que venir de Chile", esa provocadora frase dijo Arnon Kohavi hace seis meses a "La Segunda", cuando el empresario e innovador israelí de Silicon Valley aterrizó en Chile para formar el primer gran fondo de capital de riesgo para tecnología local, Yarden Ventures.
El lunes dejó Santiago rumbo a Singapur. "Cuando vine, decidí que estaría seis meses y ver qué pasaba. Hice muchos amigos, conocí a más de 150 compañías, pero todavía no es el momento para crear un gran fondo en Chile" cuenta Kohavi.
Aún cree, eso sí, que "este país tiene mucho potencial. La generación joven lo llevará al próximo nivel. En 10 años, este lugar será completamente diferente".
Antes de partir además le dio un consejo a los emprendedores: "Viajen. Se aprende demasiado, y les ayudará a ser un emprendedor y un hombre de negocios".
-¿Por qué deja Chile?
-Hay suficiente gente en Chile con recursos y esperaba que quisieran invertir en gente joven en el futuro. La gente adinerada está muy cómoda donde está, en sus industrias, el cobre, el salmón, la minería, y muchos dicen que quieren ayudar a los emprendedores, pero cuando me junto con emprendedores me dicen que es muy difícil juntar dinero. Los chilenos no están listos para invertir, para cambiar la industria de la alta tecnología en esta etapa. Estaré feliz de volver y seguir haciendo negocios cuando lo estén.
-¿Cuánto dinero necesita su fondo?
-Mi objetivo era crear un fondo de US$40 millones, pero mucho de ese dinero vendría también de CORFO. Tenía compromisos de algunas personas muy receptivas, pero un fondo es un compromiso a largo plazo y para ser exitoso tenía que ser muy grande, por los cambios que deben ocurrir en la sociedad emprendedora. Hay muchos fondos pequeños en Chile, pero no han logrado hacer suficientes cambios; un fondo grande habría dado el empuje para la gente joven. Junté suficiente, no quiero entrar en detalles, y vi compañías muy interesantes.
-¿Qué ocurrirá con Yarden Ventures?
-Mantendré el fondo, pero ubicado en Singapur, y seguirá haciendo inversiones en Latinoamérica y Chile.
-¿Cómo resumiría su paso por Chile?
-La mejor forma de resumirlo es que tuvimos una fiesta de despedida e invitamos a muchos emprendedores exitosos, de Start-Up Chile, y gente del Gobierno que nos ayudó. Cuando llegamos no conocíamos a nadie, hicimos amigos y lo serán para siempre. Son muy cálidos y apreciaron mis consejos. He conocido desde San Pedro hasta Punta Arenas, a la gente y su cultura, eso te marca y deja algo.
-¿Piensas volver?
-No importa si estoy físicamente, ya conozco a todos en el escenario tecnológico, continuaré estando en contacto y, tal vez, invierta personalmente en algunas compañías. Cuando sienta que mi presencia tiene sentido, volveré, incluso a vivir.
-¿Por qué Asia?
-Muchas compañías chilenas necesitan enfocarse más en Asia, están mirando principalmente a Sudamérica y EE.UU., pero el mayor crecimiento y el mercado están en Asia. Todavía puedo ayudar a las compañías chilenas y ser un puente en Singapur, también para que inversionistas asiáticos lleven dinero a Chile. Este país está mucho mejor posicionado que el resto de Sudamérica, no tienen que compararse con Argentina o Paraguay, sino con Corea, Taiwán, Indonesia.
Pros y contras de Chile
Kohavi es enfático en la brecha generacional que ve en nuestro país. "Los menores de 35 son como la gente joven en todo el mundo, piensan diferente. La generación mayor vive en el pasado: no habla buen inglés, no habla globalmente y muchas de las industrias en las que están son monopolios; hay sólo una aerolínea, tres cadenas de farmacias, eso hace difícil innovar".
-¿Qué es lo que Chile no está haciendo bien en innovación?
-Uno de los mayores problemas es el aislamiento, no sólo geográfico, mental. No muchos extranjeros viven aquí y Chile debe atraerlos, es importante que traigan grandes compañías tecnológicas para trabajar y luego comenzar sus propios startups . El gobierno debería dar más incentivos, pero es reticente a usarlos, también incentivar el estudio de las ciencias y cosas en las que Chile es fuerte. Por ejemplo: tiene un centro de clase mundial de astronomía, pero ¿cuánta gente quiere ser astrónomo?
-¿Y qué se está haciendo bien?
-La infraestructura es importante; en Chile todo funciona, es limpio, seguro, especialmente para extranjeros que hacen negocios. No hay corrupción, programas como Start-Up Chile son buenos, y mucha gente en el Gobierno entiende el tema. La clave está en el sector privado, porque es el mercado el que tiene que darte dinero. Nuevos emprendedores como Daniel Undurraga, de Groupon, que vendieron empresas y tienen dinero, quieren ayudar a la nueva generación y gente como él se está convirtiendo en modelos a seguir. Pero eso toma tiempo, tal vez 5 a 10 años.
“Gurú” israelí apostaba seis meses atrás:
"El próximo Skype, Facebook o Mercado Libre tiene que salir de Chile"
.