El técnico, que esta tarde firmaría contrato, llegaría por tres años, con opción de revisar su continuidad a fin de cada temporada.
Si el gerente técnico de las cruzados, José María Buljubasich, dijo que recién ayer se comunicaron con el DT y su ex club para manifestarle su interés, lo cierto es que un par de días después del despido de Julio César Falcioni ya había un virtual acuerdo. Obviamente nadie lo iba a reconocer, ya que por reglamento no se puede negociar con jugadores y técnicos de equipos rivales durante el transcurso de un torneo.
Lo que sí es cierto es que las conversaciones las llevaron a cabo con su representante y no directamente con él, que estaba preocupado de clasificar a Huachipato para la liguilla, lo que finalmente consiguió. De hecho, eso pudo haber sido un obstáculo, ya que si los acereros llegaban a la Copa Libertadores el DT habría analizado quedarse, pero al final quedaron eliminados con Palestino el domingo y de inmediato Salas anunció que buscaría nuevos horizontes.
Desde ese momento, U. Católica hizo público el interés por el DT mundialista con la Sub 20, y éste también dijo que era "un orgullo" que un club tan importante se fijara en él.
Ahora sólo falta oficializar su llegada, lo que no debe pasar de ser un trámite.
Uno de los pocos temas que faltaba por afinar era la duración de su contrato. Se hablaba de dos años, pero lo más seguro es que al final sea por tres, pero revisables al final de cada temporada.
Así evitarían correr el riesgo de que, en caso de que los resultados no sean los esperados, tengan que pagar una millonaria indemnización como ocurrió con Falcioni (US$ 450 mil).
Los detalles finales serán afinados esta tarde, en la reunión en que la plana mayor de la directiva cruzada conocerá personalmente a Salas y escuchará de su boca el proyecto y la forma de trabajo que los llevó a inclinarse por él.
Lo principal, y reconocido ayer por el propio Buljubasich, es su capacidad para sacarles rendimiento a los jugadores de su plantel. Lo hizo sobre todo en Barnechea, y será fundamental que haga lo mismo en el elenco estudiantil ya que, salvo los tres refuerzos permitidos, contará prácticamente con el mismo plantel que con Falcioni terminó en los últimos puestos del Torneo de Apertura.
Tras la reunión con el directorio se espera esta misma tarde el anuncio oficial del nuevo entrenador estudiantil, quien mañana asumiría en propiedad el cargo con miras al Torneo de Clausura que comienza la primera semana de enero.
Dentro de los tres refuerzos que cada club puede contratar para el Torneo de Clausura, para Universidad Católica la prioridad es un delantero.
El elegido es Roberto Gutiérrez, figura clave en la gran campaña que cumplió Wanderers en el pasado certamen de Apertura.
El problema es que el "Pájaro" tiene contrato por dos años, y la cláusula de salida sólo rige a partir de junio. Es decir, si los cruzados lo quieren ahora tendrían que adquirir su pase al conjunto porteño, que de seguro no tendrá interés en desprenderse de él considerando que en 2015 jugará un torneo internacional (ya sea la Copa Sudamericana o la Libertadores).
Otros nombres que atraen en San Carlos y que llegarían de la mano con Mario Salas son el defensa Omar Merlo y el atacante Andrés Vilches, ambos de Huachipato.
El primero aparece como más accesible porque tiene una cláusula de salida, pero el precio del delantero es demasiado elevado, superior al millón de dólares. Por eso la opción de Gutiérrez aparece más cercana en esa posición.
