Para ser una nación famosa por mantenerse siempre neutral y alejada de los conflictos, el actual momento del equipo de Suiza de Copa Davis no deja de llamar la atención.

Hasta el fin de semana, los helvéticos asomaban como favoritos en previa de la final por la "Ensaladera" que se juega desde este viernes en Lille contra Francia, gracias a la dupla que conforman Roger Federer y Stanislas Wawrinka.

Sin embargo, quiso el destino que ambos se encontraran el sábado en las semifinales del Masters. En la superficie, fue un partidazo que ganó "FedEx" tras casi tres horas de batalla, pero ahí empezaron los problemas.

Primero, la lucha le pasó la cuenta a Federer, quien no pudo presentarse al partido final de ayer por molestias en la espalda. Aún no se sabe la gravedad del inconveniente, pero puede que sea lo de menos, ya que en las últimas horas surgieron informaciones que hablan de una dura pelea entre él y Wawrinka tras bambalinas... cosa curiosa considerando que ambos son grandes amigos hace años, con el mejor tenista de la historia siempre actuando como una especie de mentor y hermano mayor de su compatriota.

Quien dio la primera voz de alerta fue John McEnroe -en Londres comentando el torneo para ESPN-, al indicar que el partido estuvo marcado por las frías y amenazantes miradas entre ambos; "algo pasó en el vestuario, y duró buena parte de la noche", dijo el ex número uno. Muchos desacreditaron el comentario porque "Big Mac" no habla francés y podría haber malinterpretado algo, pero nuevas fuentes han solventado su teoría.

En específico, la tensión se habría producido durante el juego entre Wawrinka y la esposa de Federer, Mirka Vavrinec, a quien acusó de "gritar y molestar" cada vez que le correspondía servir.

Por ahora, las partes involucradas no han querido ahondar en la polémica y, de hecho, ya se encuentran en Francia para preparar la serie copera.