Una película dio origen a un deporte a escala global y en donde Chile debutará en un Mundial.
Sin proponérselo "Whip It" la película que en 2009 dirigió la actriz Drew Barrymore con las actuaciones de Ellen Page y Juliette Lewis, se convirtió en un ícono entre las deportistas que buscan nuevas experiencias... o fuertes emociones.
Traducida como "Chicas sin freno" o "Chicas bravas" provocó un fenómeno poco habitual y que fue el nacimiento del deporte de más rápido desarrollo en el mundo entre las mujeres, denominado "Roller Derby".
Su explosivo crecimiento en Estados Unidos y Canadá, y que a Chile llegó el 2011 con ligas hoy en Santiago, Viña del Mar y Concepción, ha llevado a que en esos países ya se transmita por la televisión y que ahora se apresten a tener su segundo Mundial (4 al 7 de diciembre en Dallas).
Chile va por primera vez en calidad de invitado -como en el tenis, a través de una wild card - de la WFTDA (Women's Flat Track Derby Association), algo así como la FIFA de las "rollers" .
El juego consiste en una carrera en patines quad (cuatro ruedas y dos ejes) por equipos en una pista ovalada de 38 por 18 metros.
En el óvalo cada equipo de 5 jugadoras debe impedir que el otro avance en los giros utilizando el cuerpo y fuertes movimientos para sacar a sus oponentes de la pista.
"El roller es de contacto y en momentos puede ser fuerte, pero es bien intencionado...", dicen las seleccionadas nacionales Marcela Aguilera, Victoria Obreque y Paz Quinteros.
Por la rapidez con que se corre y las técnicas para bloquear a las oponentes, las patinadoras deben proteger sus cuerpos con cascos, protector bucal, rodilleras y coderas de alta gama, para resistir los choques con las rivales de manera que al momento de entrar a la pista son unas verdaderas "Robocop".
En los choques no se pueden utilizar los brazos y las manos. Los contactos son hombro a hombro, sea lateral o frontal, y particularmente, con las caderas y extremidades inferiores que permiten sacar de un solo "caderazo" o "potazo" a una patinadora de la pista.
Cada equipo pone en pista a cinco jugadoras de las cuales cuatro cumplen el rol de bloqueadoras, siendo por lo general las más macizas para resistir los embates del rival, y la más veloz y con mejor dominio de los patines -Jammer líder-, se abre camino sorteando a las bloqueadoras del otro equipo.
Completar cada vuelta le otorga al equipo 4 puntos y si logran sobrepasar a la Jammer líder rival son 5 en total.
La Jammer es quien anota los puntos y a diferencia de las otras lleva una estrella en el casco que la identifica y contra quien el rival concentra toda su artillería para que no logre concretar el recorrido.
Cada partido dura una hora, con tiempos de 30 minutos divididos en jams de 2 minutos, que es cuando las patinadoras compiten. Existe todo un sistema de penalizaciones que sanciona a quienes golpean en partes no permitidas del cuerpo y utilizando las extremidades superiores. Los castigos son como en el básquetbol donde son enviadas al penalty box durante 30 segundos con un máximo de tres salidas y deben ser reemplazadas.
Los juegos son vigilados por 7 jueces, tres dentro del óvalo y cuatro por fuera.
En Chile el roller derby se ha ido instalando en diversas comunas de la capital, donde las pioneras fueron mujeres que tras ver la película "Whip It", comenzaron averiguar por internet las características de este deporte.
"Por Facebook y las redes sociales nos contactamos con deportistas de Estados Unidos y Canadá, quienes nos enviaron los reglamentos y comenzamos a practicarlo al tiempo que íbamos aprendiendo", recuerda Marcela Aguilera, periodista, 33 años.
"El primer desafío fue encontrar los lugares adecuados; recorrimos gimnasios en muchas comunas, hasta que fuimos encontrando los mejores", dice la comunicadora social Paz Quiteros?, 27 años.
Hoy pueden practicarlo en el gimnasio municipal de San Joaquín, en escuelas de Recoleta y Macul y en el Velódromo de Peñalolén.
"El Metropolitan Roller Derby fue el primer club y hoy existe una decena de equipos a lo largo de Chile", agrega Victoria Obreque, ex azafata y chef de 28 años.
De hecho hay una segunda liga paralela a la Metropolitan llamada "Complot".
La Selección Chilena que irá a fin de año al Mundial en Estados Unidos la integran 18 jugadoras con un promedio de edad de 25 años.
Entre ellas hay dueñas de casa, arquitectas, veterinarias, periodistas, nutricionistas, kinesiólogas y tecnólogas médicas además de estudiantes. El "Metropolitan Derby", cuenta con 80 jugadoras en diferentes series, que han ido ganando experiencia internacional.
El año pasado y éste compitieron en Buenos Aires en el "Violentango", un torneo en el que participaron equipos de 9 países y donde lograron el quinto y cuarto lugar.
"Fue como una Copa Libertadores a nivel regional que nos dio experiencia internacional con miras al mundial de diciembre", señalan las patinadoras.
"Las seleccionadas están entrenando entre 5 a 6 veces a la semana. Lo hacen con sus propios recursos. Ellas financian los lugares para las prácticas, también su equipamiento y el sueño de viajar a un Mundial", cuenta Nino Rodríguez, un técnico de dilatada trayectoria en el patín chileno. Un buen par de patines quad para el roller derby no cuesta menos de $350 mil y considerando el casco y los otros protectores corporales, las jugadoras invierten alrededor de $500 mil. El viaje a Dallas tiene un costo para cada seleccionada de $1,5 millones y por eso están buscando auspicios.
"Como no somos un deporte federado los organismos regulares del estado como el IND, no pueden ayudarnos a financiar esta gira y estadía en el mundial", se quejan.
"Chile debiera abrirse y entender que ha habido un cambio importante en la sociedad con gente que practica otros deportes como el skate y que no son convencionales al igual que el roller derby , pero también son parte de nuestra imagen país en el deporte", señala Marcela Aguilera.
El roller derby es hasta el momento un deporte esencialmente femenino.
En opinión de las chilenas se debe a que "tiene muchas interacciones. Tienes que tener un buen dominio del patín en velocidad, estar atenta a lo que haga el rival, a los contactos y golpes que recibas e ir abriéndole camino a la líder que marca los puntos".
Sostienen que la mujer a diferencia del hombre es capaz de ejecutar muchos roles simultáneos. "Es dueña de casa, madre, profesional e incluso deportista".
De hecho en la Selección Chilena varias de sus patinadoras responden a estas características. "Como dicen por ahí a diferencia de los hombres, podemos caminar y mascar chicle al mismo tiempo...", concluyen con aires de orgullo.
