Este miércoles debuta en torneo "seis estrellas" y cuenta cómo será su primer desafío europeo en Francia y luego en España.
Jessica Anderson competirá en una de las regiones del surf en Francia.
Hossegor, en el corazón de una de las regiones más legendarias para la práctica del surf en Francia con una línea costera de 160 millas, será el escenario esta semana de Jessica Anderson, donde prepara su estreno europeo en un torneo "seis estrellas" -máximo nivel- que reunirá a las principales figuras mundiales de este deporte.
La chilena tendrá su revancha en las costas de Biarritz que serán su segunda experiencia global después de intervenir en el Oceanside de California, donde no logró superar las rondas iniciales entre 105 competidoras de 26 países.
"Saqué lecciones, tengo que aprender a entrenar estrategia desde el momento en que inicias tu competición", dice.
Jessica está ahora en Europa con miras al torneo francés que se inicia este miércoles y termina el 24, y posteriormente irá del 26 al 31 a Galicia, España.
"En Francia espero corregir las fallas que tuve en California. Técnicamente no tenemos grandes diferencias con las "gringas" y europeas, sólo que ellas desde pequeñas han tenido mucha experiencia y muchos viajes compitiendo en eventos masivos", apunta.
"Uno puede surfear mejor que ellas, pero no sabe utilizarlo en competencias, es la parte más difícil. Todos nos ponemos nerviosos cuando actuamos bajo presión y el secreto está en que no influya en tu rendimiento", agrega.
Jessica desde niña comenzó a entrenar en Pichilemu donde siempre ha vivido. Piensa que el surf femenino chileno está pasando por una etapa de crecimiento y que hay otras dos exponentes que perfectamente podrían ya participar del circuito mundial, como la pascuense Pumaré Tepano y Elena Fica y en el futuro Adela Recordón, que es aún muy joven.
Ella desde hace seis años que es profesional del surf. "Yo puedo vivir del surf, financio mis actividades y competencias. Los premios felizmente han ido mejorando, aunque en Chile el fútbol sigue siendo lo principal, y todos los otros deportes son secundarios".
Con 24 años y empinada en 1,75 metro y 65 kilos, se proyecta en el surf "hasta que no pueda más", si bien las surfistas de la alta competencia se mantienen vigentes hasta los 35 años máximo.
Por ahora y diariamente su trabajo físico principal está en fortalecer todo el cuerpo y las extremidades para mejorar el equilibrio. "Aparte, lo que más se entrena es el estómago, la parte abdominal y la espalda", cuenta revelando los secretos de una surfista.