Este viernes en una espectacular Ceremonia de Apertura, por fin arrancaron oficialmente los X Juegos Suramericanos de Santiago 2014. Una cita en la que las expectativas de nuestro país no sólo van de la mano de dejar una buena impresión, sino que también en lo deportivo, idealmente apuntando a un segundo o tercer lugar en el medallero. Algunos de nuestros principales créditos, como la triatleta Bárbara Riveros y la tiradora Francisca Crovetto, asoman como inmensas favoritas en sus disciplinas, pero otros deberán superar grandes escollos, generalmente de rivales a los que están acostumbrados a enfrentar.
Foto El Mercurio
Aunque a nivel mundial se han conformado con lugares secundarios, en la escala sudamericana la chilena y la venezolana llevan años protagonizando una rivalidad tremenda.
Como Kobrich (28) es mayor que Pinto (22), su feudo comenzó hace unos 5 años en el mediofondo (400, 800 y 1.500 metros libres) que ambas dominan y donde se volverán a encontrar en estos Juegos.
Es cosa de ver sus resultados cara a cara: en los últimos Odesur, Kristel fue oro en 1.500 y plata en 800, justamente el opuesto que su "némesis". Y en los Panamericanos del 2011, la chilena fue oro en 800 y Pinto, bronce, pero la llanera se cobró revancha en la mitad de esa distancia, terminando segunda, un puesto más alto que Kobrich.
Por si fuera poco, entre ambas se reparten los récords sudamericanos. La "Cobra" es dueña de la plusmarca en 1.500, pero el año pasado perdió las de 400 y 800... ante Pinto.
En fin, una batalla acuática que involucrará lugares en el podio, tiempos personales y, obvio, el orgullo.
Lo que significa, también, que el resto deberá conformarse con la plata. Y ahí, el chileno Daniel Pineda podría tener mucho que decir. Maximarquista nacional y campeón panamericano, tendrá como gran rival a Mauro Vinicius da Silva, campeón suramericano y una de las grandes figuras atléticas en la delegación brasileña, al punto que varios hablan de que incluso podría sorprender a Saladino.
Aunque el mejor gimnasta chileno de la historia aparece oficialmente inscrito en los seis aparatos -con tal de sumar la mayor cantidad de medallas posibles-, no cabe duda de que sus fuertes siguen siendo el salto y el piso. Y es en esas dos pruebas en las que tiene la gran chance de saldar su deuda, ya que, si bien tiene cuatro medallas en Odesur, aún no puede subirse a lo más alto del podio.
Una muy buena noticia fue la deserción de quien hasta ahora ha sido su mayor obstáculo a nivel regional, el brasileño Diego Hypólito, pero de todas formas el gigante suramericano se encargó de enviar un rival de categoría: Sergio Sasaki.
Eternamente opacado por su compatriota, está a los 21 años en el momento justo para confirmarse como una estrella.
El tema es que justamente sus dos mejores eventos son los mismos de González, suelo y, sobre todo, salto, donde incluso superó al chileno en los pasados Odesur.
Que Tomás consiga una medalla se da por descontado, pero sin duda él y el público estarán esperando el oro. Y, para llegar a él, el obstáculo se llama Sasaki.
Dos veces campeona sudamericana, su gran rival debiera ser la brasileña Geisa Arcanjo (22), quien en un plazo de cuatro años ha pasado a convertirse, de promesa, a una realidad concreta. De hecho, en los últimos Juegos Olímpicos superó a la chilena por un puesto, lo que la colocó de inmediato en un curso de colisión con Ducó, y con estos Odesur como escenario.
Habían pasado años desde que nuestro país no tenía un gran exponente, hombre o mujer, en la velocidad pura. Por eso, la irrupción de Isidora Jiménez ilusiona tanto. Sin embargo, si quiere quedar en la historia deberá superar a la brasileña Ana Claudia Lemos, bicampeona regional tanto en los 100 como 200 metros planos y recordwoman sudamericana en ambas distancias.
Por ahora la chilena, de sólo 20 años y que recién adquiere experiencia a este nivel, tendría que hacer la carrera de su vida para superar a Lemos -o a su compatriota Franciela Krasucki- pero, si llegara a lograrlo, el Nacional viviría una de sus jornadas que no se olvidan.
Pareciera que Gonzalo Barroilhet y el brasileño Luiz Alberto de Araujo estuvieran destinados a encontrarse en estos Juegos, ambos campeones sudamericanos a nivel juvenil y adulto con muy pocos años de diferencia.
Además de la localía, que es siempre un factor importante en una competencia que abarca tantas disciplinas e involucra varios días de competencia como el decatlón, le dan la ventaja a Barroilhet, quien además tiene mejores registros personales y terminó mejor ubicado en los últimos Juegos Olímpicos de Londres (13º contra 18º). Pero en la delegación brasileña ven a De Araujo como su gran esperanza para retener el cetro de los Odesur en esta prueba, que hace cuatro años la ganó Diego Pereira de Araujo.
El eterno dilema de que el patinaje de velocidad no sea una competencia olímpica representa que, para los especialistas chilenos, estos eventos regionales sean sus grandes desafíos.
Y con Chile como una sempiterna potencia en la disciplina, las expectativas son altas, centradas sobre todo en María José Moya, la campeona mundial en los 200 metros contrarreloj.
Pero si nuestro país es potente, también lo es Colombia, que trae dos representantes de peso: Yersy Puello y Paola Segura.
Las cafeteras fueron oro y bronce en los Juegos Bolivarianas del año pasado, donde la plata fue... para Moya, por lo que las tres saben perfectamente lo que necesitan para superarse.
