Por su tradición, prestigio y alto nivel de competitividad, con presencia de deportistas top y difusión a nivel global, el Rally Dakar es el principal evento deportivo que organiza el país cada año desde 2009, cuando la prueba se trasladó desde Africa a Sudamérica.

Desde entonces, Chile no sólo pudo ver en acción a los grandes pilotos extranjeros, sino que potenció a los créditos nacionales en una disciplina que crece a diario y que ya tiene a sus propios pilotos de élite.

De Gavardo fue el primero en moto y "Chaleco" López tomó la posta. A ellos se les suma ahora Ignacio Casale, quien a sus 26 años ya logró nada menos que un segundo puesto del Dakar en cuadriciclos, entrando de lleno en la élite del rally cross country.

Pese a este status , reconocido en todo el mundo tuerca, Casale -piloto profesional- debe recurrir al clásico puerta a puerta con el fin de conseguir ayuda financiera para completar lo que le falta de los 120 millones de pesos que cuesta defender su podio dakariano, algo que, paradójicamente, no tuvo que hacer cuando debutó en esta carrera, pues recibió ayuda del Estado.

Este año, el piloto chileno quedó sin equipo, ya que el que lo cobijó en el Dakar dejó de funcionar, y ahora se debate en una impensada lucha por conseguir recursos.

"Me quedé en el aire en cuanto a equipo al auspiciador principal. Habíamos proyectado ir al rally Ruta 40 en Argentina, al Dos Sertoes de Brasil este mes y en Egipto en octubre. Ahora no tengo equipo para el Dakar 2014, pero voy de todos modos, porque ya estoy inscrito y tengo otros auspiciadores que me han ayudado muchísimo".

-¿Siente que necesita más ayuda del sistema estatal que sí entrega Wild Cards a corredores emergentes?

-Es bueno que exista ese apoyo a la gente cuando está partiendo. A mí me dieron ese respaldo con dos Wild Cards cuando corrí la primera vez en motos y la primera en quads, y eso es muy bueno, pero cuando nos profesionalizamos y esto se convierte en un trabajo, creo que quedamos un poco a la deriva, ya no tengo ese mismo apoyo. Quizás sea bueno crear otro ADO para deportistas de élite que no son olímpicos, sino enfocado en deportes que tengan representantes de alto rendimiento y con resultados. Los que competimos en el Dakar ya no corremos por vivir la experiencia, sino que somos embajadores deportivos, llevamos la bandera chilena hasta el podio y la ven en todo el mundo, porque somos pilotos destacados.

- La Ley del Deporte es como la única opción que les queda, aparentemente...

-Esa es la gran solución que nos dan, pero en mi caso, como piloto profesional, puntero de la categoría quads, no sirve de mucho, porque son más trámites, más reuniones y papeleos para obtener algunas lucas, y luego hay que andar guardando todas las boletas para rendirlas. Creo que eso no es para un deportista profesional que requiere enfocar sus esfuerzos en entrenar y preparar la competencia. Eso implica estar toda la semana en reuniones y sin poder entrenar bien, porque se requiere ir al norte y estar varios días allá. A uno le ayudan al principio, pero cuando consieguimos el objetivo, y logramos dar a conocer el buen nivel de los pilotos chilenos, nos dejan solos. Yo tengo la ayuda de mis auspiciadores, pero siempre hay que andar golpeado puertas por aquí y por allá para cubrir todo el costo de ir al Dakar, que es una de las más caras del mundo para correr.

-Quizá habría que plantear esta idea de crear una suerte de plan ADO alternativo, como propone

-El país ha hecho bien apoyando a los deportistas olímpicos con toda su preparación para sus diversas competencias, pero no son los únicos deportistas que dan réditos al país. De hecho, los deportes extremos y los que no son olímpicos, como el mismo rally, están haciendo más ruido que los olímpicos, entonces sería bueno crear otra institución como ADO que apoye a quienes vamos a pelear la punta en el Dakar, pero de manera diferenciada, no con la Ley del Deporte, porque finalmente te resta mucho tiempo en preparación.

-¿A su juicio, quiénes deberían estar en este selecto grupo?

-Al menos en el rally, que es mi deporte, los pilotos realmente competitivos son Chaleco, los hermanos Prohens, Daniel Guet, Jeremías Israel, Pablo Quintanilla y yo. Nadie más. No es tanto lo que habría que invertir en estos deportistas de punta, sin dejar de ayudar a quienes se inician con la Ley del deporte y que no se dedican a esto.

-¿Qué sucederá si esta ayuda no llega?

-Tengo 26 años, imagino que hasta los 30 estaré en cuadriciclos y después me voy a retirar y quizás después no llegue otro piloto de nivel. Pasó Casale, segundo del Dakar por sus propios méritos y el de sus auspiciadores y luego pasaré al olvido. En cambio, con ayuda puedo proyectarme a los autos y seguir adelante con una carrera importante en el rally portando la bandera de Chile y no aburrirme de andar consiguiendo recursos para luego montar un negocio y dedicarme a otra cosa, como les pasa a muchos deportistas.