"Hay que pensar en grande", dice Cristián Pringles, quien produce el evento que ahora quiere intercambiar talentos con Colombia, Perú y Nueva York.
Ya no es un sueño. La industria de la moda chilena crece y el productor del Santiago Fashion Week - que tendrá lugar entre el 6 y 8 de noviembre en el Centro Cultural Palacio La Moneda-, Cristián Pringles, asegura que el próximo año se podría firmar una alianza con el New York Fashion Week (NYFW) para intercambiar talentos de ambos países: "Queremos posicionarnos como un evento internacional".
El Fashion Week es una marca que lleva el nombre de la capital de cada país en el que se hace y la versión santiaguina es la original.
Hace algunas semanas tuvieron una reunión con los directores del evento de Colombia y Perú para firmar un primer acuerdo. A la reunión también asistió el presidente de la NYFW.
"Esto significa que podríamos traer a diseñadores estadounidenses y los chilenos ir a sus pasarelas, no como visitas, como van muchos. Hay que pensar en grande, porque si no nos quedamos con lo que tenemos y eso no tiene mucho sentido".
Traerán a la modelo rusa Irina Shayk, novia de Cristiano Ronaldo y protagonista de "Hércules", junto a la Roca, quien desfilará para Rubén Campos, que vuelve las pasarelas después de 6 años con una colección que revive sus 30 años. "Apuntamos a que en algún minuto se sume algo como el Paris Fashion Week. La idea es tener en algún momento a un Dior, Channel", sostiene.
Cristián Pringles es argentino y trabajó con Tinelli en "Video Match", comenzó con Camilo Valdivia en Santiago de Moda hace siete años hasta que se independizó.
"En Chile no ha habido un buen trabajo a nivel de producción de moda. Cuando viajé a Colombia a firmar, me preguntaban por qué recién ahora Chile hace esto si es un país muy estable. Estos eventos tienen mínimo 15 años en otros países".
Por lo mismo, hace una crítica constructiva a la industria chilena: "Los diseñadores deberían empezar a crecer también como empresarios y tener su línea de alta costura, urbana o prêt-à-porter. También tiene que ver la parte comercial".
"Pocas chilenas se visten con diseñadores nacionales. A diferencia de otros países, aquí se compra mucho en malls en vez de cosas exclusivas. Los retails son los más fuertes de la moda y tienen que empezar a adoptar, como ya lo han hecho algunos, a diseñadores como Karyn Coo o Matías Hernán. Los chilenos consideran que si algo viene de Europa o EE.UU. es mejor. Le dan mucho valor a lo que viene de afuera".