Es momento de calentar motores para recibir en nuestro país a una de las cantantes más polémicas de los últimos tiempos. Miley Cyrus ya había venido en 2011, cuando recién se desmarcaba de su imagen de Hannah Montana (Disney).

Pero es otra la que llegó este lunes en su jet privado, a sus 21 años, mucho más atrevida y polémica y acompañada de un staff de 50 personas.

En Chile solicitó cuatro vestuaristas extras, que se encargarán de tener sus outfits impecables, y una costurera.

Ya tiene más del 80% de las entradas vendidas (Puntoticket), para el concierto que dará este miércoles en Movistar Arena (van desde los $18.000 a los $132.000).

Su Bangerz Tour comenzó en febrero en Vancouver y lleva recaudado casi US$ 70 millones a nivel mundial.

En cuanto a sus exigencias culinarias, pidió excluir el cerdo de todas las comidas, pues no lo consume desde que tiene uno de mascota: Bubba Sue. Además, es alérgica a la canela y pidió frutas, agua mineral y jugos naturales. La petición para Latinoamérica incluye vodka, whisky, comida celíaca y orgánica, una heladera, una tostadora, pavo orgánico y chicles.

El show que mostró en México presentó variaciones en los temas y en su ropa, originalmente diseñada por Roberto Cavalli y Marc Jacobs, entre otros.

En el DF causó revuelo, luego de que sus autoridades la acusaran de ofender su bandera patria en medio del show. Por consiguiente, le exigieron disculpas públicas, además de una multa de 1.214 dólares.

Anoche actuó en el Sambódromo do Río, Brasil, y luego subió a su Instagram (@MileyCyrus) una series de fotos en las que posaba fiestera.
“El show con la mayor resaca de la historia ha sido completado”, escribió en su Instagram.

El sábado en la noche cenó sushi en el elegante barrio de Leblon y se fue a una celebración privada en una mansión en el barrio de Joá, lo mismo que hizo Justin Bieber cuando estuvo allá.

“Uno de los momentos más aplaudidos fue cuando Miley cantó «Adore you». Pero justo antes llamó al escenario a una fan y se sacó una selfie con ella. Después le hizo un pedido al público: «Antes de interpretar este tema que habla de amor, quiero que se besen. Mientras más se besen más posibilidades tienen de aparecer en la pantalla»”, publicó O Globo.

“La próxima Madonna”

Apenas debutó, las críticas favorables sorprendieron a varios escépticos. Contact Music publicó sobre su espectacular presencia en el escenario y declaró que “la entrada de Cyrus era suficiente para recomendar el espectáculo allí mismo”.

El sitio Idolator describió la actuación como “un paseo ácido, extraño y maravilloso”. Y aunque afirma que el espectáculo no es perfecto, “es mejor que los de Katy Perry y Rihanna”.

Rolling Stone señala: “Tal vez el hecho más impactante de la noche... fue que no hubo nada que te dejara la boca abierta en toda la noche” y que por fin Cyrus logra el objetivo de que la gente vaya al espectáculo y la vea como una cantante seria.

Entertainment Weekly elogió la gran calidad vocal de Cyrus y la calidad del espectáculo.

Billboard también alabó su calidad vocal. Y la revista Time elogió la actuación de la cantante en Brooklyn, llamándola “una de las artistas más dinámicas de su generación... no necesita tantos trucos baratos”.

USA Today señaló: “Demostró que ha llegado el momento de seguir la conversación sobre la ex estrella de Disney más allá del movimiento notorio que arrastró a Robin Thicke en los MTV Video Music Awards... Cyrus tiene el carisma y tal vez la inteligencia para ser la próxima Madonna”. Y añadió que parecía ser “accesible, dentro y fuera del escenario, de una manera en que Madonna nunca lo hizo”.

The New York Times describió que “bailó con animales de peluche y perreó con chicas. Hizo referencias a las drogas y usó malas palabras. Cantó sobre sentirse sexy, sobre terminar con un chico que la engañó y se agarró la entrepierna. Usó elementos visuales y musicales del hip hop, pop y country como si fueran lo mismo para ella, como debería serlo. Pero pocas personas esperaban lágrimas”.

The Guardian sentenció: “No es sólo entretenimiento. Es alegre, demente, vulgarmente caricaturesco y es imposible no entretenerse”.