"La gente nos dice «Los Kardashians»", cuenta Leopoldo "Leo" Méndez entre risas y, fiel a su estilo, revela, sin tapujos, que "no está ni ahí" con el show de las famosas hermanas hollywoodenses.

"El que sí vi fue «Los Osbournes». Ozzy es un maestro", lanza.

El músico y empresario regresa mañana a las pantallas de TVN con la cuarta temporada de "Los Méndez", el docurreality de él y su familia que ha sido un éxito en la franja prime durante sus tres entregas anteriores.

"La gente me dice que les quito el dolor de sus enfermedades, que los saco de sus penas. Imagínate que en medio de la tragedia en Valparaíso me preguntaban cuándo empezaba la serie. La gente se caga de la risa conmigo. Yo soy un tony, un gueón cara de raja, arriesgado y alegre", relata.

"Es que soy el imán de los problemas", asegura. "No necesitan un guionista conmigo. Te hago cinco telenovelas venezolanas. Tengo más dramas que la cresta. Así soy yo".

Leo, que habla en sueco con Marcela Duque, su esposa y sus seis hijos, afirma que esta nueva entrega del programa fue una decisión en la que participó todo su clan. "Tenemos reuniones familiares, eso es algo que me dio Suecia".

La primera temporada de "Los Méndez" se transmitió en 2012. "Hice el piloto porque pensaba que lo único que la gente sabía de mí era que era bueno para carretear ¡Y lo soy!, pero no es lo único que hago en la vida. Ser empresario es difícil. No puedes carretear todos los días y mantener una empresa seria. Yo decía: ¿Cómo le hago entender a la gente que tengo 6 hijos, que me saco la cresta por ellos y que soy muy jodido con las reglas en la casa? No todo es hueveo en mi vida", explica.

Y cree que ya consiguió hacer el cambio. "La gente ahora sabe que soy un gueón que cuando trabaja, trabaja y cuando huevea, ¡chucha que huevea! La vida sin mambo, no sé qué vida sería. Gracias a Dios tengo una mujer que me entiende perfectamente y sabe que no voy a cambiar".

"Ahora tengo fanáticas de la tercera edad"

A fin de mes termina su contrato con TVN. "Creo que lo he hecho bien y están contentos conmigo, pero no hemos hablado de extender el contrato. Pero creo que es mejor ser libre para poder tocar más de una puerta. DJ Méndez no está para amarrarse. No me urge renovar porque yo no soy un Viñuela ni un Julián. No vivo de la televisión", asegura.

El capítulo de este miércoles, en tanto, incluye una broma bastante pesada de la familia completa y la partida de su hija Stephanie de la casa, quien ahora vive con Matías Gil, su pololo. "Para mí fue una derrota. No me gusta perder. Mi familia se vengó de todos los malos ratos que les he echo pasar, pero se les pasó la mano. Fue súper cuático. A mí no me gustó", acusa.

"Yo no soy atractivo, soy atrevido. Prefiero que me vean como un tipo cojonudo", sostiene Méndez.

Aunque revela que se sometió a una abdominoplastía y una cirugía de papada, a escondidas de su familia. ¿La razón? Las burlas que recibía de parte de sus hijos mayores. "Hubo presión", cuenta Leo.

-¿DJ Méndez es vanidoso?

-No, para nada. No me operé por vanidad. DJ Méndez está lejos de ser vanidoso. Ni siquiera dejo que mi mujer me saque las cejas (risas).

-¿Y qué tal tu relación con las fans ahora que eres un hombre casado?

- Ya no tengo fans jóvenes, ahora tengo fanáticas de la tercera edad. A las viejitas chilenas les encanta DJ Méndez. ¡Ya no soy sexy para las jóvenes! No sé qué está pasando.

-¿Qué otras sorpresas trae la nueva temporada?

-Mis hijos crecen y los problemas crecen. El Esai creció de una forma... él es la nueva estrella de la familia. Se maneja más que todos frente a las cámaras. A la Eva, además, ya le gusta alguien y yo vuelvo a sacar la escopeta de nuevo. Esta es una temporada de los cambios. Y el que Steffi se haya ido a vivir sola fue un golpe muy duro para mí.

-¿Y qué es lo peor de estar en un reality ?

-Cuando la gente se presta para inventos, cahuines y morbo televisivo con programas de farándula. Pero, menos mal que le he pasado cojones a toda mi familia. Yo digo: Siempre con la verdad por delante, porque así no tenemos nada que temer.