Ayer, la familia Beckham compró en 60 millones de dólares una de las mansiones más lujosas en Villa Versace, en Miami, que perteneció al destacado diseñador italiano Gianni Versace. La misma donde murió. La operación la llevó a cabo Proto Organization, en Londres, empresa encargada de los asuntos inmobiliarios del futbolista y de otras celebridades como Cristiano Ronaldo.

Tras seis meses de negociación con el dueño, adquirieron la propiedad que tiene 10 habitaciones, 11 cuartos de baño, una piscina, un salón de casi 250 metros cuadrados. Suman alrededor de 2 mil metros cuadrados, pero sus historias de terror abundan.

La mansión fue edificada el año 1930 y luego de eso, fallecieron tres de sus dueños sucesivamente y de forma violenta.

De hecho, Versace tenía conocimiento de estas versiones cuando adquirió la propiedad en el año 1992, por una suma de 11 millones de dólares. Incluso, gran parte de su dinero lo destinó para remodelar el sitio.

El 15 de julio de 1997, uno de los referentes más importantes de la moda, fue asesinado de un disparo. Versace estaba abriendo la reja de su casa cuando lo atacó Andrew Cunanan, un sicario que se suicidó días después.

El 2000 la villa fue comprada por el estadounidense Peter Loftin, quien tenía la intención de convertir la mansión en un hotel de lujo, pero fracasó el proyecto.

En tanto, Victoria Beckham apareció radiante junto a su marido en la primera edición de Vogue Francia, donde cuenta estar feliz con su faceta de diseñadora. Su colección otoño-invierno fue aclamada en la Semana de la Moda en Nueva York.