Islam, plagios y discriminación: 5 polémicas en la vida de Cat Stevens

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Inspirado por el folclore griego que escuchaba su padre, Stavros, desde los 15 años que Steven Demetre Georgiou quería ser un astro del pop. En los '60, una novia suya le dijo que tenía ojos de gato. Eso -sumado el ímpetu de su hermano David para que se convirtiera en cantante- lo hizo transformarse en Cat Stevens .

A sus 65 años, el reconocido compositor inglés -que popularizó hits como "Father and Son", "Moonshadow" y "Wild World"- alista su debut en Chile con dos shows en el Movistar Arena, el 28 y 30 de noviembre. El furor de sus fans ha sido tal, que ya se han vendido más de 18 mil entradas (Puntoticket).

Llegará a nuestro país rebautizado como Yusuf Islam , nombre que adoptó oficialmente el 4 de julio de 1978, cuando abrazó la fe musulmana.

¿Por qué se inclinó por esta religión? En años anteriores padeció de tuberculosis y abusaba de las drogas y el alcohol. Estuvo hospitalizado durante tres meses, y nueve postrado en su hogar.

Así profundizó en el budismo y en la meditación; probó I-Ching, numerología, tarot y astrología. Aunque en ese tiempo también desarrolló sus habilidades en la guitarra.

Pero fue el Corán, el libro islámico sagrado que le regaló su hermano (quien había visitado Jerusalén), el que le dio una luz de esperanza. "Me di cuenta de que el cuerpo y el alma no están apartados. Nosotros debemos seguir la voluntad de Dios y no podemos elevar más alto que los ángeles... Comencé a perder el orgullo; siempre había pensado de que estaba acá debido a mi propia grandeza", confesó entonces.

Bajo el mismo credo, en 1979 se casó con Fauzia Mubarak Ali , con la cual tuvo cinco hijos, entre ellos Muhammad , quien lanzó una carrera solista en 2006, como Yoriyos.

La conversión de Yusuf revolucionó el universo de la música. Tras el álbum "Back to Earth" (1978), Cat abandonó los estudios de grabación, renunció a los escenarios y se abocó a las enseñanzas de Alá. Luego de 28 años, retornó con "An Other Cup" y, en 2009, estrenó "Roadsinger". En 2010 participó junto a Ozzy Osbourne en el megaevento de Barack Obama "Rally to Restore Sanity and/or Fear".

La vida de Stevens ha tenido de dulce y agraz. Y también de polémicas. Aquí, algunos capítulos controversiales.

1. La condena a muerte

El 14 de febrero 1989, el ayatolá iraní Jomeini acusó de blasfemar contra el islam al escritor indio Salman Rushdie por su novela "Los versos satánicos", publicada el año anterior. El líder espiritual chiita, incluso, ofreció una recompensa en efectivo por la muerte del autor, quien durante once años tuvo que ser protegido por Scotland Yard.

En ese contexto, salió a la palestra Cat Stevens. Fue criticado por apoyar la sentencia de Jomeini, luego de sus fuertes dichos en un programa de la BBC. "Yo debería llamar a alguien que pudiera hacerle más daño de lo que él quisiera. Trataría de llamar al ayatolá Jomeini y decirle dónde exactamente está ese hombre", declaró.

Afirmó que los medios lo tergiversaron y aclaró que, a pesar de no aceptar el contenido de ese texto, no admitía un castigo tan tremendo. "Los musulmanes deben ceñirse a las leyes de los países donde tengan residencia", se excusó.

2. El supuesto terrorista

El cantante fue deportado de EE.UU., en septiembre de 2004, "por razones de seguridad nacional". Viajaba junto a su hija en un avión procedente de Londres con destino a Washington, el cual fue desviado a otro aeropuerto. A ella se le permitió el ingreso al país; en cambio, Yusuf fue interrogado por el FBI.

Según fuentes del servicio de seguridad, había donado altas sumas de dinero a la agrupación terrorista palestina Hamas.

En 2000, también fue expulsado de Tel Aviv a horas de aterrizar en Israel: lo inculparon de haber apoyado con miles de dólares a esa organización. El señaló que tales aportes fueron por motivos humanitarios.

3. ¿Ignorar a mujeres sin velo?

Cat fue indemnizado por calumnias, en julio de 2008. La agencia de noticias inglesa World Entertainment News Network informó que él se había negado a hablar con mujeres que no llevaran el velo islámico en la ceremonia de los premios germánicos ECHO, en marzo de 2007. El galardón le fue entregado "por los logros en la vida como músico y embajador entre las culturas".

El sitio en cuestión se disculpó públicamente, y aquella compensación económica fue transferida a la organización benéfica "Small Kindness", la cual preside el artista.

Su abogado, Adam Tudor, explicó que tal artículo había avergonzado y angustiado a su representado, porque creó una falsa imagen de su relación con las féminas. "Ahora aceptamos que estas afirmaciones carecen por completo de fundamento y que el señor Islam nunca ha tenido ninguna dificultad trabajando con mujeres, ya sea por motivos religiosos o de cualquier clase", especificó.

Yusuf, en 2005, también había ganado una batalla legal, después que los periódicos "The Sun" y "Sunday Times" sostuvieran que él apoyaba el terrorismo.

4. Los dichos de Benedicto VXI

En septiembre de 2006, Stevens arremetió contra el Papa Benedicto XVI por sus negativos comentarios hacia los musulmanes. En una conferencia, en la Universidad de Ratisbona, Alemania, el pontífice citó al emperador bizantino Manuel II Paleólogo: "Muéstrame también aquello que Mahoma ha traído de nuevo y encontrarás solamente cosas malvadas e inhumanas".

Ante esto, Cat comentó a la BBC: "Antes solía creer que el Papa era infalible. Debería familiarizarse con la interpretación pacífica de la religión, con lo que escribió el líder indio Mahatma Gandhi".

Y remató: "El debería haber mirado en otra parte si tenía intención de citar, pero respetamos al Papa y su posición. Realmente, creo que se ha retractado, en parte, y eso es bueno".

5. En la mira: The Flaming Lips y Coldplay

El plagio siempre ha sido un dolor de cabeza para Yusuf. En 2003, la banda de rock alternativo The Flaming Lips acordó dividir los ingresos del tema "Fight Test" con el músico, porque se emparentaba con el clásico "Father and Son", de 1970. En entrevista a "The Guardian", el vocalista Wayne Coyne apuntó: "Podríamos haber cambiado la melodía, pero no lo hicimos. Siento mucho que Cat Stevens piense que a propósito plagiamos su trabajo. Me da vergüenza. Es evidente que hay una línea muy fina entre inspirarse y robar. Pero si alguien quisiera pedir prestado parte de una canción de nosotros, no lo perseguiría. De todos modos, Cat Stevens no va a hacer suficiente dinero".

Y, en abril de 2009, la misma situación se repitió. Pero con Coldplay. El grupo de Chris Martin ya había enfrentado una acusación del guitarrista Joe Satriani -quien los trató de "carentes de originalidad"- por la similitud de "Viva la Vida" con su "If I Could Fly".

Un mes más tarde, Stevens reclamó que ese hit remitía a la melodía de "Foreigner Suite" (1973). "Si la escuchas, ¡es mía!", expresó a "The Sun".

No tomó acciones legales y los perdonó. Al "The Daily Express" aseveró: "Ellos copiaron mi canción, pero no creo que lo hicieran a propósito. Yo me he copiado a mí mismo, sin saber que lo he hecho... No quiero que piensen que estoy enojado. Me encantaría sentarme a tomar una taza de té con ellos y decirles que todo está bien".

El embajador británico en Chile, Jon Benjamin, (recordado melómano), es un gran admirador del repertorio de Cat Stevens. Sus temas favoritos son "Tea For The Tillerman" y "Where Do The Children Play?". "¡Fue una parte esencial de la banda sonora de mi adolescencia!", exclama.

Es testigo de la buena recepción que Yusuf tiene en el público chileno.

"Es un misterio para mí por qué ciertos artistas gozan de tal fama aquí. Sin embargo, puedo decir que él marcó a una generación que ha disfrutado su música por más de 40 años, y este gusto musical se ha logrado transmitir a las generaciones venideras. Hay que destacar la transversalidad en el estilo de su música", sostiene.

Otra fanática es la animadora de "Mucho gusto" (Mega), Katherine Salosny : "¡Me gustan todas sus canciones! Cat Stevens está en el historial de uno. Lo empecé a escuchar desde chica, por mi mamá", cuenta. "Me recuerda las fogatas. Era un clásico, porque tocábamos sus canciones en guitarra. Todos nos sabíamos sus temas. ¡Hasta el día de hoy me las sé! (risas). Es un romántico eterno".