Granjero, carpintero, piloto y ecologista, pero sobre todo, Harrison Ford es un actor tan capaz de golpear con su látigo  de Indiana Jones, como de ponerse de lo más tierno.

Este viernes, la estrella de Hollywood cumple 70 años.

Sus comienzos en el cine también son de película: como el actor no ganaba lo suficiente con sus papeles secundarios, se metió a carpintero. Un día, tuvo que dar unos retoques en casa de un señor llamado George Lucas.

Este, que aún no había cumplido los 30, planeaba hacer una película de bajo presupuesto sobre los jóvenes de su pequeña ciudad. Y fascinado por el carisma del carpintero, decidió ficharlo.

“American Graffiti" se convirtió en un éxito mundial que lanzó a la fama a Lucas y dio a conocer a Ford.

Con el dinero y la reputación recaudada por la película, Lucas pudo emprender un proyecto radicalmente distinto: "Star Wars".

Ford vuelve a estar a su lado, esta vez en una papel de mayor calado. Aunque ya tiene 35 años y, en realidad, es algo mayor para convertirse en héroe de acción y rompecorazones, su personaje de Han Solo es para muchos críticos el más importante y "cool", frente al protagonismo del pálido Mark Hamill como Luke Skywalker.

Con "Star Wars" Ford se convirtió en una estrella, que adquirió rango de leyenda con "Indiana Jones".

El arqueólogo de látigo en mano, que idearon Steven Spielberg y Lucas, no sólo volvió a poner de moda el sombrero. Los productores y Ford consiguieron crear un héroe de otro tiempo, que no obstante encajaba perfectamente en los 80 y 90, e incluso en la primera década del siglo XXI.

Millones de hombres querían ser como él: ese tipo inteligente pero un tanto temerario que, con su chaqueta de cuero, sombrero y látigo saltaba de una aventura a otra.

Ford dio vida a “Indy” en cuatro ocasiones, la última en 2008. Y por aquel entonces, ya superaba con creces los 60.

Entre medio, estuvo en varios títulos que siguieron haciendo historia y también alguna que otra película banal.

Entre las primeras, destaca el clásico de ciencia-ficción "Blade Runner" (Ridley Scott), enmarcada en un oscuro y desolado 2019. También en "Frantic", de Roman Polanski, y "Regarding Henry", de Mike Nichols, hizo gala de su talento, pero su filmografía no está exenta de decepciones.

El remake de "Sabrina", la floja "Seis días y siete noches" o "Cowboys vs. Aliens" son algunos ejemplos.

Aunque a Ford, estas cosas no parecen preocuparle. Da la impresión de ser un hombre en paz consigo mismo.

Se casó hace dos años con la actriz Calista Flockhart, 22 años más joven, tiene un rancho en Wyoming y le encanta volar.

Entre la media docena de aviones que posee hay un Waco 10 de 1929. Muy del gusto de Indiana Jones.

Además, Ford es un hombre de política, especialmente en lo que a cuestiones medioambientales se refiere. Una vez, incluso se depiló el pecho con cera para defenderlo. "Cada trozo de selva que nos arrancan, nos dolerá", decía en un video publicitario. Un compromiso que le ha valido un curioso honor: en 2002 fue descubierta una nueva clase de hormiga, la "Pheidole harrisonfordi".

Y desde 1993 existe la "Calponia harrisonfordi", una araña devora arañas.