Sobre el escenario se confrontan dos mujeres. Una sufre penas de amor, mientras la otra canta feliz de la vida. Una es la mujer de carne y hueso y, la otra, la artista. Ese es el eje de la obra "María versus Callas", un homenaje a una de las cantantes de ópera más importantes del siglo XX, que se exhibirá mañana a las 18:00 horas en el Teatro del Lago en Frutillar.

Este montaje, producido por la Fundación Mustakis, forma parte del "Fin de semana griego", que comienza hoy con la exhibición del filme "La sal de la vida". Mañana se mostrará el documental "Callas Assoluta" del alemán Philippe Kohly y luego el crítico musical Juan Antonio Muñoz dará la charla "María Callas, la última diosa griega".

La presentación de "María versus Callas" cerrará esta jornada en honor a Grecia. La obra es dirigida por Pedro Vicuña y es protagonizada por la actriz Carmen Disa y la joven cantante soprano osornina, Paulina González. La escenografía y el vestuario están a cargo de los diseñadores Jonás Ortega y Vicente Tapia, de la marca "Costume Design".

"Un proceso productivo como en los 50"

Pese al éxito obtenido por María Callas en todo el mundo, su vida personal no estuvo exenta de momentos oscuros. En 1959, la cantante decidió dejar a su marido Giovanni Meneghini por el millonario griego Aristóteles Onassis, con quien vivió un romance que fue muy divulgado por la prensa de la época. Callas esperaba que Onassis le pidiera matrimonio, pues era su gran amor. No obstante, él nunca le concedió ese deseo dándole diversos pretextos.

En 1968, Aristóteles Onassis abandonó repentinamente a María Callas para contraer matrimonio con Jacqueline Kennedy, viuda del presidente norteamericano John F. Kennedy. En 1970, la cantante fue internada en un hospital porque habría tratado de suicidarse ingiriendo variados barbitúricos, que tomaba para mantenerse en paz.

En "María versus Callas" hay un intento por plasmar ese espíritu trágico a través del vestuario que usan las actrices. Carmen Disa interpreta a María, la mujer real que sufre, mientras que Paulina González hace el papel de Callas, la intérprete lírica. Así, ambas conforman las dos aristas que componen a la famosa cantante.

"Una es Carmen Disa vestida con un trajecito: Es María Callas tras bambalinas, quien acostumbraba a ponerse su traje y encima una bata o un caftán, pero cuando salía al escenario se lo sacaba por completo. Quisimos replicar eso", señala Vicente Tapia, de "Costume Design". Por otra parte, "La artista (representada por Paulina González) estará en el escenario con un vestido de ópera, un collar, se irá cambiando elementos, las cosas que usa son más espectaculares", agrega.

Cuentan que los eligieron para hacer el vestuario y la escenografía gracias a las fotos que tienen en su página web, donde aparece la actriz Javiera Díaz de Valdés con un look similar al de Sophia Loren, en la colección llamada "Rosa del campo" de 2010.

Los diseñadores rescatan en sus confecciones a una mujer clásica y elegante, por lo que María Callas es un referente para ellos desde antes de elaborar el vestuario para la obra. "Para nosotros es femenina, muy sofisticada y elegante, eso es fundamental", dice Vicente. "Ella vivió en Nueva York toda su vida, pero es griega y tiene ese garbo y esa onda muy europea", comenta Jonás.

"Quisimos respetar cada proceso productivo de la prenda como en los años 50, cuando fue el boom de María Callas. Desde ahí, empezó a transformarse en un mito. Nos montamos en ese período para diseñar y elegir nuestra propuesta de vestuario", agrega.

Para diseñar estas piezas, Vicente y Jonás vieron muchas fotos y también se inspiraron en la serie de HBO "Mildred pierce" (un remake de la película homónima de 1945), protagonizada por Kate Winslet, quien interpreta a Mildred, cuya hija es cantante lírica. Aseguran que eso los inspiró para desarrollar la propuesta, porque "una soprano tiene un look bien particular, es un espectáculo súper pasional, de divas", dice Jonás.