"Se ensañaron conmigo... Ahí conocí a la verdadera Quintrala, había una mujer con mucha personalidad, muy parecida a mí", señala la animadora, quien vivió una semana con una modesta familia de Estación Central.
"Extrema". Así define Raquel Argandoña su vivencia en "Adopta un famoso", el nuevo programa de TVN que debuta el martes 6 en horario prime.
Karen Doggenweiler, Carolina de Moras, Adriana Barrientos y Fabricio Vasconcellos son sólo algunos que también participarán en este docurreality, que contempla doce capítulos y doce personajes. Y la opinóloga del "Buenos días a todos" abrirá los fuegos con un episodio que dará que hablar.
"Nunca me había visto en una situación así. Durante una semana me fui a la casa de una familia, que no sabía cuál era; ni ellos tenían idea de quién llegaría. Viví sus costumbres, la forma en que dormían y se vestían. Tuve incertidumbre, miedo, nervios, ansias, ¡todo junto!", comenta Raquel, quien residió en un modesto hogar en Estación Central, después de abandonar su cómodo departamento de Las Condes.
Y agrega: "Me metieron en una caja, me llevaron en un transporte tipo mudanza y me depositaron en esta casa. Cuando abrieron, dije: «¡Qué es esto! ¿Adónde voy? ¿Por qué me mandaron? ¿Cómo voy a vivir aquí? ¿Qué haré acá?»... Me vi expuesta a muchas pruebas, en el sentido de aguante, de soportar, compartir y convivir con otra gente que no tiene tus mismas costumbres".
Reconoce que, al cuarto día de convivencia con la dueña de casa y sus tres hijos, "exploté varias veces". "Ahí conocí a la verdadera Quintrala. En la casa había una mujer con mucha personalidad, muy parecida a mí".
En esa semana "hubo momentos de furia, tanto de mi parte como de ella... ¿Si volvería a vivir esa experiencia? No podría responder. Durante siete días no vi a mi familia y viví en condiciones nada que ver con las que yo vivía". Además, padeció una crisis profunda: "Me dieron ataques de llanto y quise renunciar. Me desahogué con Mauricio Correa, director del «Buenos días a todos». El me aterrizó y me impulsó para que siguiera. Necesitaba desahogarme con alguien, ¡porque no podía hacerlo con la dueña de casa ni con los niños!".
-¿Fue como estar encerrada en un reality show?
-Fue peor, porque en los realities hay flexibilidad. Compartes con más gente y todos viven lo mismo. Pero aquí, ¡nada! Con las únicas personas con las que conversaba era con esta familia. Yo iba igual al canal y ellos me acompañaban. También acompañé a esta mujer a su trabajo, fui a las reuniones de sus hijos y compartí con su círculo de amistades.
-En la publicidad del programa apareces como Cleopatra...
-A lo mejor quisieron comparar un poco las comodidades que uno tiene con la vida de los demás. Pero, de verdad, creo que se ensañaron conmigo. La producción me ofreció esto porque, quizás, me tenían mala, porque fui el caso más extremo de los 12 capítulos. Esto no se trata de comprar cosas materiales ni de ir a una multitienda, traer a una persona y decir: "Decóreme, ordéneme y límpieme esto".
En enero, Argandoña sufrió a causa de una bacteria alojada en un riñón, que la dejó internada en dos ocasiones. Afortunadamente, grabó "Adopta un famoso" antes de la enfermedad. Hoy está mejor, pero "lo único que quiero es dormir tres días... Al 100% no estoy, y me canso mucho".
Festival de Viña: "Es un simple programa de TV"
Ad hoc a su labor en el matinal de TVN, Raquel no titubea al hablar sobre el reciente Festival de Viña: "Se criticó mucho a los animadores y a Eva Gómez. La conducción y la responsabilidad son compartidas. Cuando actuó Rosana, y no le funcionó el micrófono, salieron los animadores y preguntaron: «¿En qué te podemos ayudar?». Supongamos que Eva se tupió y no pudo rellenar. Pero estaba Rafa. A él no le gusta conducir con otra persona, porque está acostumbrado a hacerlo solo. En general, hubo un conjunto de equivocaciones... Los animadores pasaron a ser unos simples conductores. El director y la organización del festival estaban compitiendo con el rating. Todos antes nos concentrábamos en el Festival de Viña... Ahora, es un simple programa de TV que compite con otro".
Acerca de los artistas que pisaron la Quinta, acota: "Estuvo bien, aunque hubo muchas fallas. Nunca habíamos tenido un «Mundos opuestos». Sergio Nakasone fue el gran ganador de este festival, porque lo obligó a cambiar la pauta y a competir con un reality, algo que nunca habíamos visto". Y añade: "Nakasone es el monstruo de los realities. Lo quiero mucho. Hice «1810» con él, y es un genio. Nunca un reality suyo ha fracasado. Crea situaciones y se le ocurren cosas increíbles. Para cambiar la pauta de un festival y que todo gire en torno a su reality, es por algo".
"Estoy en la etapa ideal"
Raquel es también parte de "Las Indomables", el café concert que arrasó durante el verano en Santiago y regiones.
Junto a Patricia Maldonado, Pamela Díaz y la Dra. Cordero recorrieron casi todo Chile, y han causado furor: "Fue un regalo de Dios, porque nos ha ido muy bien. Estamos agendadas hasta junio. A veces hacemos 2 ó 3 funciones al día y es muy cansador. Nos vamos en avión en el día, pero en las noches viajamos en bus, y es cansador asistir a los matinales al día siguiente".
-¿Cuál es la clave del éxito? ¿Es porque no tienen pelos en la lengua?
-A la gente le gusta ver lo que nosotras decimos, porque muchas veces en TV, por las líneas editoriales de los canales, no podemos decir nada.
-¿Y hay posibilidad de un programa propio?
-No. Estoy muy cómoda con lo que tengo. Hubo proyectos para un programa de farándula y está en estudio. En este momento, quiero trabajar en un programa donde gane bien, lo pase bien y me quede tiempo para disfrutar. No sacas nada con estar llena de proyectos y no aprovechar. En la vida uno tiene que trabajar y también divertirse. Yo estoy en la etapa ideal.
