La figura se suma la controversia que generó otra estatua de Jackson instalada en el estadio de Craven Cottage.
La estatua tamaño real del "Rey del pop".
Foto AFP
Ira y molestia provocó una estatua de Michael Jackson con su bebé colgando de una ventana instalada en Londres.
Los fans se mostraron molestos por la escultura de tamaño real, titulada "Madonna and Child", que recuerda un memorable incidente protagonizado por el Jackson en 2002, cuando ante la mirada atónita de cientos de admiradores mostró a su hijo menor, Prince Michael II, sujetándolo precariamente por encima de la barandilla del balcón de su habitación de hotel en Berlín.
Los seguidores de Jackson condenaron la obra de la artista sueca Maria von Kohler, que fue instalada en The Premises Studios, un estudio de grabación de Londres. Los fans de Michael Jackson se molestaron, porque "son las críticas violentas, las mentiras, la mentalidad de la prensa sensacionalista", comentó uno de ellos, llamado Paul, en la web del estudio.
El director general del estudio, Viv Broughton, defendió la escultura alegando que era "una declaración para suscitar una reflexión sobre la fama y la idolatría".
La polémica se produce en medio de otra controversia suscitada por una primera estatua de Jackson intalada por el ex propietario de los almacenes Harrod's y presidente del club de fútbol de Fulham, de la Premier League inglesa, en el estadio de Craven Cottage.
Al Fayed, que era amigo de Jackson, ha llegado a decir a los aficionados del club que si no les gusta la estatua se pueden "ir al infierno", después de que algunos críticos dijeran que parecía una figura de acción.