Autos híbridos y su apuesta por menos emisiones

Autos híbridos.

Hace 8 años el mercado automotor nacional experimentó un lanzamiento peculiar hasta entonces. Los autos híbridos arribaron a nuestro país prometiendo una atractiva ecuación entre la tecnología que los hace operativos tanto con gasolina como electricidad, un mejor rendimiento que un vehículo convencional, menos emisiones contaminantes y hasta un mayor silencio en la conducción.

La llegada de estos modelos supuso el inicio de la puesta al día de nuestro país respecto de la tendencia mundial de ir avanzando cada vez más hacia el uso de vehículos sustentables.

¿Qué ha pasado desde entonces? El primer vehículo fue traído por la japonesa Honda, pero hoy esa marca no tiene modelos de este tipo disponibles en el mercado local. A pesar de ello, Luis Vecchionacce, subgerente de Marketing de Honda Motor de Chile 4W, recuerda el carácter pionero de la gigante nipona en el desarrollo de esta tecnología a nivel mundial.

“En Chile también fuimos los primeros en traer autos híbridos. Por lo mismo, Honda Chile tuvo que pavimentar el camino y hacer verdadera docencia para explicar en qué consiste y cuáles son las ventajas de esta tecnología ante la prensa, autoridades, universidades, etc., cuando era totalmente desconocida en nuestro país. Creemos haber hecho un aporte significativo”, destaca.

Según la contabilidad de la Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC), en 2006 se vendieron 43 unidades híbridas entre enero y octubre. En igual período de lo que va de 2014 sumaban 197.

Pese al crecimiento, las ventas de estos vehículos representan apenas el 0,1% del total de automóviles nuevos vendidos. Este año las marcas que los han comercializado son Kia, Mitsubishi, BMW, Toyota y Lexus.

Dificultades en el camino

Para el ejecutivo de Honda, existen varias razones detrás de la lenta penetración de esta tecnología en nuestro país. Entre ellas, reconoce que “en Chile, a diferencia de otros países, no existen beneficios tributarios que incentiven el uso de tecnologías ‘verdes’, que son más avanzadas, pero también más costosas que los vehículos a combustión tradicional”, a lo que se sumaría el hecho de que “el consumidor final no está dispuesto a pagar ese mayor costo”.

Vecchionacce advierte que esta situación se mantendrá si las condiciones para un mayor  acceso a esta tecnología no cambian, aun¬que enfatiza en que “en ningún caso hemos renunciado como marca a seguir trayendo nuestros modelos híbridos”.

Gustavo Castellanos, secretario general de la ANAC, coincide en que una de las difi¬cultades que han debido enfrentar este tipo de vehículos es el mayor precio que tienen en comparación con los de un auto convencional, debido a las tecnologías asociadas.

Con todo, resalta que si bien estos autos tienen un costo más alto de lo habitual, es una tecnología que está siendo aceptada por los usuarios, “y sin lugar a dudas va a ser muy importante para los años venideros hasta llegar al vehículo eléctrico y, posteriormente, al de hidrógeno”.

Kia es otra de las marcas que se aventuró en traer a Chile esta tecnología con su modelo Optima Híbrido. Antonieta Melo, gerente de Marketing de Kia Chile, reconoce que a pesar de que el mercado ha experimentado altos y bajos, y que el segmento de vehículos híbridos no ha tenido un boom desde su inicio, sí se ha notado una evolución en las ventas.

A su juicio, la introducción de los híbridos ha logrado crear una conciencia más limpia en términos de conducción en los consumidores, especialmente en un segmento con mayor conciencia ambiental. “Hay un nicho que está en busca de una conducción ‘verde’, eficiente y en pro de la descontaminación, pero aun así, con un vehículo de tecnología, cómodo y seguro. Esto es exactamente lo que ofrece nuestro Kia Optima Híbrido, y la razón por la cual la gente ha optado por probar e invertir su dinero en este modelo”, comenta.

Las cifras de la marca coreana hablan de este incipiente interés: respecto de hace un año, las ventas aumentaron en 28%, con más de 70 unidades comercializadas en lo que va de 2014.

La ejecutiva destaca que el modelo com¬bina las características de un motor eléctrico con uno tradicional en su rango de alto ren¬dimiento. Sus emisiones de CO2 son de 119 g/km y logra un rendimiento en carretera de hasta 20,1 km/litro.

Mayor rendimiento, más eficiencia

La apuesta por los autos híbridos que algunas marcas están llevando adelante está en línea con la necesidad de reducir las emisiones de un parque automotor que crece día a día. De hecho, se estima que a nuestro mercado están ingresando alrededor de un millón de vehículos nuevos cada cuatro años, lo que plantea desde la perspectiva de la eficiencia energética un gran desafío como sociedad, porque se necesita que tengan la mayor eficiencia posible.

Ignacio Santelices, jefe de la División de Eficiencia Energética del Ministerio de Energía, considera que el desarrollo tecnológico que se incorpora a través de nuevos vehículos con tecnologías híbridas y eléctricas ayuda a alcanzar ese desafío en la medida que los consumidores estén  debidamente informados.

Al respecto, destaca que el interés de los  automovilistas por tener automóviles más eficientes ha crecido, algo que queda en evidencia con la exigencia del etiquetado de eficiencia energética vehicular, que permite comparar el rendimiento de combustible de vehículos nuevos disponibles en el mercado nacional. Refuerzan esta afirmación las más de 17 mil visitas mensuales que recibe el sitio web www.consumovehicular.cl, que
permite a los compradores de vehículos nuevos realizar comparaciones entre distintos modelos respecto del rendimiento, entre ellos los híbridos.
Sin embargo, el experto de la cartera de Energía sostiene que la tecnología híbrida está todavía en desarrollo, de modo que cada año es posible observar cómo nuevos modelos llegan a nuestro mercado con diferentes características técnicas.

“El desafío no está en masificar una tecnología en particular, sino en masificar los conceptos de eficiencia energética que este tipo de vehículos representa. Lo que queremos es crear una cultura de la eficiencia energética, en que todos nos comprometamos con hacer uso de la energía de la manera más eficiente”, subraya.

En ese sentido, asevera que el dueño de un vehículo que es más eficiente en el consumo de combustible obtiene dos principales beneficios: en primer lugar, está realizando un aporte al medio ambiente, puesto que los vehículos con mejores rendimientos son los que emiten menos CO2, y por otra parte, quienes utilizan vehículos más eficientes o de menor consumo ahorran dinero.

Por ejemplo, al comparar el station wagon más eficiente con el más ineficiente dentro del listado disponible en el sitio www.consumovehicular.cl, se puede llegar a ahorrar una diferencia de más de $2 millones al año en combustible, considerando un recorrido de 20.000 km/año. En el marco de la Agenda de Energía del Gobierno se estableció una meta de reducción del consumo energético del país de 20% al año 2025, para lo cual los ministerios de Energía y Transportes y Telecomunicaciones, quienes participan del Comité Interministerial de Eficiencia Energética, tramitan un convenio cuyo objetivo es establecer un vínculo de cooperación y un marco de acción que permitan avanzar en normativa, políticas y programas tendientes a mejorar la eficiencia energética del parque vehicular del país.

El plan es abordar en conjunto el etiquetado de eficiencia energética de vehículos medianos y pesados de carga, y pasajeros, y el establecimiento de estándares de consumo energético para vehículos livianos, medianos y pesados.

PERFIL DEL USUARIO

De acuerdo con datos de la ANAC, hasta el momento son particulares quienes prefieren este tipo de vehículos, aunque existe un gran interés por flotas de taxis.

En el caso de los particulares, son personas que desean adquirir un vehículo que le represente un menor costo de uso, pero que también son conscientes de que es importante hacer un esfuerzo para que, independientemente de que los vehículos que se están incorporando al parque tengan las mejores tecnologías disponibles a nivel mundial, como la Euro5, el impacto de las acciones del hombre en el medio ambiente local baje.