Eduardo Arriagada
Profesor
Facultad de Comunicaciones UC
www.blogsuc.cl
@earriagada
La semana pasada les comentaba que la baja en las ventas del iPad reflejaban justamente la fuerza que había tomado el sector de tabletas. Más que un mal desempeño de Apple, se evidenciaba la fuerte entrada de los baratos Androids de Google, los Fire de Amazon y las tabletas que funcionan como los PCs de Microsoft.
Esta semana se informó que las ventas globales de las tabletas no solo superan a la suma de PCs y portátiles, sino que en mercados como el inglés incluso superaron la ventas de televisores.
El hecho es que en el año 2010, cuando se lanzó el iPad, lo móvil representaba el 3,7% del tiempo digital de los norteamericanos, frente al 22% que en ese momento eran los PCs en general. Sin embargo, hoy lo móvil ya explica el 23,3% de su uso del tiempo de estos en medios, frente al 18% de los PCs. La televisión pasó de un 41% a un 36%, y los periódicos en papel cayeron de 3,1% a 1,6%.
Medios que apostaron por lo táctil, como The New York Times, ya cuentan con 800 mil suscriptores a sus diversos tipos de muros de pago. Si seguimos sus pasos recientes, vemos que por cada dos dólares que el periódico pierde por la caída de su negocio impreso, obtiene 3 dólares por la suma de sus nuevos emprendimientos digitales. La revista The New Yorker consiguió un 50% más de audiencia en Internet este año con el único objetivo “de convertir a sus lectores en suscriptores de la revista en papel o en iPad".
En el Financial Times ya se trata al computador tradicional y al portátil como un espacio tan pasado de moda como lo impreso. Este mes el 60% de sus visitas digitales han llegado desde aparatos móviles. El análisis de los horarios de las visitas de móviles y PCs del diario económico inglés refuerza la idea de que el fin de semana es el reino de lo móvil, el que también se impone a primera hora de la mañana y después de las seis de la tarde. Las tabletas se han tomado los horarios propios de los medios de calidad, que son la primera hora de la mañana y la vuelta del trabajo. Ambos momentos han sido tradicionalmente los más usados para leer los buenos periódicos y revistas.
Una de las empresas más exitosas en el nuevo espacio, The Economist, hace pocas semanas cambió su definición estratégica: ahora es “lo táctil primero y lo móvil después”, dejando en completo segundo plano el sitio web corporativo. Otra empresa que no hay que perder de vista es la editora de revistas Hearst. Lejos de entusiasmarse con ideas de llenar de multimedia las aplicaciones de revistas en tabletas, se decidió por la simplicidad en su oferta. Se concentra en lograr entregar una experiencia "tan buena como la del papel".
Esquire ha ido por el lado del aprovechamiento de su nombre. Su estrategia trata de multiplicar los momentos “esquire” para sus lectores. Además de su revista impresa, que también está en iPad, lanzó una edición semanal que cobra y funciona solamente como una aplicación exclusiva para iPads. Sumando sus estrategias, la empresa ha llegado a lo que debieran aspirar todos: “engagement”, participación comprometida, tráfico, ventas de suscripciones y un relevante aumento en las utilidades.
¿Cómo estamos por casa? Un mundo de oportunidades. Apenas un par de medios han ido más allá de entregar el PDF para las tabletas, la experiencia más débil que se puede entregar, considerando que en diciembre del año pasado se habían vendido más de 1,3 millones de tabletas.