La eBIQUE permite la conexión permanente mediante telefonía 3G, con una pantalla táctil de cinco pulgadas, aunque también se puede acceder a ella mediante tabletas o teléfonos móviles.
Así luce este nuevo modelo con un diseño inspirado en las motos más que en las bicicletas eléctricas tradicionales.
Foto Qoros
SHANGHAI, China.- La nueva firma china de automóviles Qoros, creada en 2007 como una empresa mixta entre el fabricante privado china Chery y el consorcio Israel Corporation, presenta hoy en Ginebra su primera bicicleta eléctrica con internet.
La compañía china, que también presenta desde hoy en el Salón Internacional de Ginebra (Suiza) su segundo modelo en producción, el Qoros 3 Hatch, anunció su prototipo de bicicleta eléctrica eBIQUE Concept “para el consumidor metropolitano moderno”, eficaz tanto en las calles como fuera de la carretera.
Qoros asegura que es el primer prototipo de bicicleta eléctrica del mundo con conexión directa a internet, similar a la que la marca ofrece de serie en sus automóviles, con un cuidado diseño y las opciones de pedalear sin asistencia, hacerlo con ayuda del motor eléctrico o circular sólo con la energía de su batería de litio.
De esta manera, la marca también ha configurado tres modos de conducción disponibles: “Street”, que limita la velocidad máxima a 25 kilómetros por hora (lo que hace de eBIQUE una motocicleta en algunos mercados); “Eco,” que apura al máximo la eficiencia en el consumo de energía, y “Power”
Esta última función, con ayuda del motor, permite lograr una aceleración más rápida y una velocidad máxima de 65 kilómetro por hora, para una bicicleta que puede alcanzar los 25 kilómetros por hora en dos segundos, gracias a una batería que se recarga en 80 minutos en cualquier toma de corriente eléctrica común.
La conectividad de la eBIQUE con internet utiliza la plataforma QorosQloud de los coches de la marcha china, y permite la conexión permanente mediante telefonía 3G, con una pantalla táctil de cinco pulgadas montada en el manillar, aunque también se puede acceder a ella mediante tabletas o móviles inteligentes del usuario.
Eso permite, mediante computación en nube, ofrecer funciones como la planificación avanzada de rutas, su seguimiento en mapas de geolocalización, la posibilidad de comprobar la presión de los neumáticos y la carga de la batería y la consecuente autonomía del vehículo, además de opciones de acceso a redes sociales.
A eso se suma un sistema de reconocimiento de huellas dactilares, utilizable por varios usuarios, una tecnología de aprovechamiento de la energía de la propia frenada del vehículo para recargar la batería, lo que aumenta su eficiencia y tiempo de autonomía, y un chasis de fibra de carbono sobre la estructura de acero de la bicicleta.
