El sitio ha recaudado más de US$145 millones para unas 17 mil iniciativas. Los emprendimientos exitosos en Chile, hasta ahora, se vinculan con áreas de diseño mapuche y educación ambiental para niños.
Más que un sitio para financiar proyectos, Kickstarter suele ser definido como una verdadera comunidad de emprendimiento en el que los cibernautas pueden publicar sus proyectos, financiar otros y recibir distintos productos o servicios a cambio de su inversión.
Fue fundado en 2008 por tres jóvenes estadounidenses y tiene su centro de operaciones en Nueva York. Hoy es la mayor plataforma a nivel mundial para financiar proyectos emprendedores: hasta ahora, más de US$145 millones han sido aportados a través de la página y más de 17 mil proyectos han logrado ser exitosos, como la primera correa para el Ipod que lo convirtió en un reloj de pulsera o un lápiz que sirve tanto para el iPad como para escribir sobre papel. En octubre del año pasado, a través de su blog, Kickstarter señaló que contaba con más de un millón de backers , o usuarios, que además de inscribirse en la página se han comprometido a donar dinero, de los cuales un 89% ha apoyado a un proyecto exitoso.
¿Cómo funciona? Para publicar un proyecto, primero se debe crear una cuenta en Kickstarter y cumplir las condiciones de pago de Amazon, empresa que funciona como cobrador de los montos recolectados. Una vez hecho esto, se crea el proyecto y se envía al equipo de Kickstarter para que sea evaluado. Si es aprobado, lo publican en la sección Staff Picks , o selección del personal, para que empiece a recaudar el monto solicitado.
Los emprendedores tienen entre 1 y 60 días para juntar el dinero que necesitan para sus proyectos. En este período, otros usuarios inscritos en la página buscan y eligen los proyectos más atractivos en los que quieren invertir, y hacen una "promesa de donación" en caso de que se recaude el monto. Este pacto puede ser de distintas sumas de dinero y a cambio de algún producto que ofrezcan los creadores. Si la iniciativa es exitosa y el monto total se recauda en el tiempo fijado, Amazon descuenta automáticamente el dinero comprometido a quienes se suscribieron. Si no lo logran, queda en la página web.
Así se pudo concretar la primera correa para convertir el iPod nano en reloj pulsera, que logró recaudar US$950 mil de 13.000 donadores, o un lápiz que funciona tanto en papel como en el iPad, que juntó US$309.183, cuatro veces más de lo que necesitaba.
Diseño con comunidad mapuche de Nueva Imperial
En Chile también hay proyectos que han sido exitosos recaudando fondos. Uno de ellos fue realizado por Jasmine Aarons, una ingeniera y diseñadora de la Universidad de Stanford que llegó a Chile hace algunos años para realizar un proyecto para una ONG con comunidades mapuches. Luego de cuatro meses se dio cuenta de que el tiempo no había sido suficiente y decidió quedarse y crear un proyecto de moda y diseño con una comunidad de Nueva Imperial.
Para hacerlo necesitaba un capital de US$8.000 y decidió postularlo a Kickstarter . Así creó el proyecto "Voz", que, como ella describe, utiliza la innovación y el diseño para ayudar a los artesanos indígenas a salir de la pobreza mediante la conexión con la industria de la moda. Se demoró sólo un mes y medio en conseguir el monto, que finalmente ascendió a US$8.600. Ese fue el capital inicial con el que comenzó el proyecto, ya que luego postuló a Start up Chile, donde consiguió el resto del financiamiento para seguir expandiéndolo.
Según Jasmine, para tener éxito se debe montar una idea creativa y vendible, y focalizar todo el esfuerzo en las primeras 24 horas, pidiéndoles a los amigos que compartan el contenido. Al tener más visitas, permanecerá en el homepage y podrá ser visto inmediatamente por los usuarios cuando entren a la página.
Actualmente trabaja con otras tres chilenas y planean abrir tiendas en Pucón, San Pedro de Atacama y Santiago.
Educación ambiental para niños chilenos
Otro de los casos exitosos fue llevado a cabo por una bióloga de la Universidad de Princeton que se encuentra realizando un doctorado en Chile.
A través de su paso por nuestro país, Meredith Root-Bernstein identificó un animal de la zona central llamado Degú, que "no era muy conocido por la gente porque no conocen los animales que hay en su país". Así creó un proyecto de educación ambiental para niños de entre 5 y 10 años, que consiste en un afiche con ilustraciones explicativas sobre la especie y que al doblarlo se convierte en un libro.
Luego de diseñarlo necesitaba US$440 para imprimir las copias y distribuirlas en los colegios. Así postuló su proyecto a Kickstarter y les avisó a sus parientes y amigos para que lo difundieran. Después de un mes logró casi el doble del dinero que necesitaba y actualmente lo está distribuyendo en colegios y tiendas relacionadas con fotografía y deportes outdoor para que "los chilenos conozcan más su ecosistema".