Si estás embarazada y por nada del mundo quieres subir de peso más de la cuenta en las próximas Fiestas Patrias, nada mejor que aprovechar las bondades de la mesa chilena para hacer de las ensaladas y las carnes tus mejores aliados, dejando en el olvido la creencia popular de que “lo mejor es comer por dos”.

 Así de simple, porque lo importante es mantener una dieta equilibrada consumiendo al menos 5 comidas diarias en pequeñas cantidades o porciones, dejando de lado el pan amasado, las empanadas y todos aquellos hidratos de carbono que no aportan nada bueno a tu salud ni a la de tu bebé.

Frente a la pregunta ¿qué comer', la nutricionista y dietista Alejandrina Varela, cuenta que algo sumamente aconsejable es que en vez de los cereales -arroz, choclo o las papas mayos- lo ideal es reemplazarlos por  las verduras con salsas a base de yogurt y ciboulette. Y, mejor aún, incluir el pebre, que a su juicio es un excelente acompañamiento para aliñar, ya que con sólo media taza estás consumiendo 40 calorías.

Ahora, si vas a comer palta, lo máximo es hacerlo sólo dos veces por semana y si consumes frutos secos, hazlo, pero en muy pequeñas cantidades.

El infaltable asado

Y como no habrá un buen 18 sin su asado, la experta recomienda evitar las carnes ricas en grasa como cordero, cabrito o cerdo, dando paso a los cortes de carne como el asiento, picana, pollo ganso, posta negra, posta rosada, punta de ganso, abastero, posta paleta, punta paleta, filete, lomo liso o tártaro.

Con respecto a los pescados, no hay problema con el que comas, ya que al contener omega 3, su ingesta resulta muy beneficioso para ti y tu bebé.

Del pollo, la nutricionista recomienda consumir pechuga en vez de truto o ala, ya que éstos son los que concentran mayor cantidad de grasa.

Y, agrega: “Preocúpate de privilegiar el volumen en los alimentos y presentar tus alimentos en platos más pequeños, con ello  aumentarás tu saciedad y dejarás de lado la sensación de que lo que comiste no fue suficiente”.

A la hora de las celebraciones entonces, la experta aconseja:

· Evita las grandes comilonas y el distanciamiento excesivo entre comida y comida.  No te pases de más de 3 horas sin comer. 

· Si vas a desayunar, hazlo liviano, para que puedas ingerir un poco más de  hidrato de carbono durante el almuerzo.  Lo importante es que al final del día mantengas un balance total y evites concentrar los hidratos de carbono durante de la noche.

· Reemplaza los embutidos a base de carne de cerdo por carne de ave como pollo o pavo, y acompáñalos por marraqueta integral sin miga.

· Para poder manejar tu ansiedad por comer, realiza actividad física. Las caminatas de media hora son ideales para tu etapa.

· Reduce los azúcares y todo lo que provenga de él, ya que estimulan más tu apetito.