La mayoría piensa que el estrés crónico sólo afecta el ánimo y las emociones, pero también perjudica la salud del cuerpo, especialmente la piel.
El estrés sicológico no solo afecta las emociones, también perjudica la piel
Foto El Mercurio
El ritmo de vida acelerado y las preocupaciones diarias hacen que día a día más personas presenten estrés. Esto afecta, mayoritariamente, a la piel, lo que provoca tener una piel estresada, con imperfecciones o alergias que suelen pensar se deben a otros factores y que se irán pronto.
La subdirectora de
Ortiz dijo que en el caso de que el estrés se prolongue, el cutis puede empeorar a tal punto de presentar dermatitis atópica, eczema, rosácea o psoriasis. En todos estos cuadros la piel se presenta “roja, escamosa, con manchas e incluso erosiones que de alguna manera son la puerta entrada a microorganismos que pueden causar enfermedades o complicaciones”.
El estrés sube los niveles de cortisol, hormona que estimula la producción de las glándulas sebáceas, lo que hace que aparezcan granos e imperfecciones, intensificando los casos de acné. Cuando la piel sufre una agresión externa, no puede reponerse porque se dificultan las funciones de regeneración, reparación y cicatrización del cutis.
Recomendaciones para la piel estresada
La especialista entregó recomendaciones para no empeorar el cuadro de piel estresada.