La infiltración de plasma rico en plaquetas se puede realizar en rostro, cuello, escote y manos, atenuando arrugas finas. Mientras, el ácido hialurónico es apropiado para arrugas profundas y el bótox para arrugas por gestos.
Foto El Mercurio
El eterno combate a las arrugas y manchas cutáneas propias del envejecimiento facial tiene un aliado en nuestro propio cuerpo: las plaquetas, elemento de la sangre que ha sido incorporado a los tratamientos de belleza para combatir el envejecimiento.
"La técnica de infiltración de plasma rico en plaquetas permite retroceder el paso del tiempo y revertir el envejecimiento celular de manera natural, utilizando los mismos mecanismos de reparación que tiene el cuerpo", explica el doctor Alexis Enamorado, quien comenzó a aplicar este procedimiento en Pretty Woman Esthetic Center.
Cuando la piel padece un corte, las plaquetas de la sangre entran en acción liberando elementos que contribuyen a la formación de nuevas células y de arterias que ayudan a la nutrición y oxigenación de los tejidos para repararlos. Al observar estas propiedades de regeneración celular de las plaquetas se derivó en la creación de esta técnica mínimamente invasiva y que ha declarado utilizar la actriz Catherine Fulop.
El tratamiento consiste en la extracción de entre 5 y 20 cm cúbicos de sangre, la que se centrifuga desechando los glóbulos rojos y blancos, y sólo quedando el plasma con las plaquetas que se estimulan con calcio u ozono. Este plasma concentrado en plaquetas se inyecta en las zonas que se busca rejuvenecer.
"El tratamiento utiliza las propiedades curativas de las plaquetas, para potenciar su acción regenerativa en áreas del rostro como párpados, contorno de ojos, frente, surco nasogeniano, y en cuello, escote, dorso de las manos e incluso cuero cabelludo para combatir la alopecia", explica Enamorado.
Las plaquetas actuarán creando nuevos vasos sanguíneos que mejorarán la nutrición y oxigenación de los tejidos, junto con estimular a las células fibroblastos a generar colágeno y elastina que dan firmeza y elasticidad a la piel. Además, cumplen una función epitelial, es decir, ayudan a la formación de células nuevas.
"Esta técnica ayuda a regenerar la piel, y es aconsejable para las personas que tienen arrugas finas. Al cabo de un mes se aprecia arrugas atenuadas, un rostro revitalizado, más luminoso, turgente, donde se nota un retroceso del tiempo hacia una piel más juvenil", explica el facultativo que comenzó a aplicar el procedimiento en los centros Pretty Woman de La Reina, Lo Barnechea y Santiago Centro.
"Esto permitirá acercar esta técnica a más personas, pero es importante que siempre la realice un médico", explica Yanet Zaror, directora de Pretty Woman Esthetic Center.
Un tratamiento completo comprende entre 2 a 4 sesiones dependiendo de la necesidad del paciente, aplicado con alrededor de 20 días de separación.
Arrugas dinámicas o en reposo
Junto con la técnica mínimamente invasiva de infiltración de plasma rico en plaquetas, en Pretty Woman Esthetic Center se comenzó a aplicar los tratamientos de bótox para arrugas dinámicas y ácido hialurónico para rellenar arrugas profundas.
"Las arrugas dinámicas se producen cuando la persona realiza un movimiento facial, pero que desaparecen cuando deja de realizar el gesto", explica Enamorado.
Como la recurrencia de la gestualidad puede dejar una marca, esta toxina sintética tiene como función paralizar el músculo y detener la formación de la arruga.
"Para no perder gestualidad es fundamental la experiencia del médico en saber qué gestos preservar del paciente, como la movilidad de las cejas", advierte Enamorado.
Habitualmente la toxina botulínica o bótox se aplica en el tercio externo de los ojos, entre cejo y frente. Su efecto puede durar de 4 a 8 meses.
En cambio, la inyección con gel de ácido hialurónico es aconsejable para personas con arrugas faciales en reposo, es decir, que sin hacer ningún movimiento en el rostro tienen la cara marcada.
El ácido hialurónico se inyecta debajo de las arrugas profundas y también finas y al expandirse las borra con un efecto inmediato. Se puede usar en personas sobre 30 años, en entrecejo, alrededor de los ojos, en el surco nasogeniano y en las llamadas líneas de marioneta alrededor de la boca. Su efecto perdura de 4 a 8 meses.
