La doctora Catherine Parraguez, neonatóloga del Hospital San Juan de Dios-CDT, aseveró que “la leche materna es ideal para el recién nacido, porque estimula los lazos psicológicos y afectivos entre madre e hijo”.
El natural acto de amamantar a un recién nacido es relevante no sólo para la alimentación y para fortalecer el apego, también implica el desarrollo biopsicosocial del menor, es decir, de factores biológicos, sicológicos y sociales, así lo explicó Karina Muñoz, matrona jefa del Hospital San Juan de Dios-CDT.
La especialista manifestó que “el apego y el vínculo entre el menor con su madre o su cuidador los insta a estar unidos. Esto se traduce en que neurológicamente será un niño más desarrollado porque sabrá comunicarse con el medio, por tanto, aprende mucho más, siendo niños más despiertos y seguros”.
Asimismo, la doctora Catherine Parraguez, neonatóloga del Hospital San Juan de Dios-CDT, aseveró que “la leche materna es ideal para el recién nacido, porque estimula los lazos psicológicos y afectivos entre madre e hijo”.
Para el niño, según manifestó la matrona, el que la madre lo amamante ayuda a armonizar los estados de estrés, tales como el hambre, frío, sueño o cualquier situación que lo incomode, porque “el bebé sabrá que puede contar con una persona frente a este tipo de situaciones y eso lo tranquiliza. Esta comunicación hace que se produzcan situaciones regulatorias y se crea en su cerebro un aprendizaje que, después de 1 año y medio de vida, el niño sentirá la seguridad que su madre o cuidador estará ante situaciones de peligro”.
Leche materna o sustitutos
Según la encuesta de lactancia materna realizada por el Ministerio de Salud el 2010, el 45% de los lactantes es amamantado hasta los 6 meses. El mismo sondeo reveló que en el caso de las madres que trabajan fuera del hogar la cifra baja a un 14% y en aquellas mujeres que permanecen en casa, lo hacen en un 55%.
Al respecto, la neonatóloga del Hospital San Juan de Dios-CDT afirmó que “la leche materna aporta elementos inmunoprotectores, disminuye el riesgo de infección y estimula la maduración del intestino. Además contiene inmunoglobulinas que protegen al recién nacido de enfermedades infecciosas”.
En este sentido, la leche materna “debe ser exclusiva por seis meses, debido a las múltiples evidencias de sus beneficios. Es el alimento perfecto, ningún sustito es igual, en canto la calidad, a cantidad de proteínas, de lípidos, de vitaminas, anticuerpos, tiene la temperatura exacta, es cómoda, es barata, es exactamente el aliento que el niño necesita”, finalizó.
“El acto de amamantar no sólo es un beneficio en términos de alimento, también involucra el contacto con la madre, el olor, la vista, el movimiento, el niño desde que era una célula siempre tuvo en movimiento y contacto con su madre y una vez que nace ya no lo tiene más. Por esto es fundamental alimentar al bebé porque requiere el contacto”, puntualizó la especialista.
Finalmente agregó que “los niños que son alimentados exclusivamente con leche materna por 6 meses, son adultos más integrados, donde su relación con la sociedad será semejante al vínculo que tuvo cuando fue recién nacido y que estableció con su cuidador”.
El Proyecto de Ley
El país dio un importante paso en ratificar el compromiso adquirido en 1990, cuando firmó la "Declaración de Innocenti", promovida por la OMS y Unicef, la cual reconoce la necesidad de fomentar la lactancia materna.
Al respecto, la doctora Catherine Parraguez, expresó que la iniciativa legal “me parece muy importante que se logre en todas las mujeres chilenas, porque los beneficios de la leche materna le proporciona múltiples beneficios”.
Asimismo, la matrona Karina Muñoz afirmó que “con el Proyecto de Ley estás pensando en la sociedad del mañana, estás construyendo una sociedad con seres humanos que se relacionan sanamente con los otros, de manera más pacífica, es la mejor inversión que puede hacer un país”.
